Michael Corkery y Jessica Silver Greenberg
Las firmas de ventas de automóviles pueden saber cuándo usted abandona la ciudad y en qué lugar estaciona el rodado. Pueden saber cuántas veces fue al supermercado o a una consulta médica.
La venta de automóviles a estadounidenses con historial de bajo crédito es un negocio en expansión y muchas entidades financieras y agencias de ventas de coches están empleando la tecnología para localizar los rodados en poder de los prestatarios en caso de que necesiten recuperarlos.
Esta vigilancia –dicen las firmas de ventas de automóviles– les permite extender el servicio a más estadounidenses de bajos ingresos, ya que pueden ubicar fácilmente los vehículos. Añaden que también están colocando dispositivos en los autos para bloquear de manera remota el encendido de los motores de los coches, opción que se aplica si el cliente no incurre en morosidad.
En este contexto, los reguladores federales están investigando si esos dispositivos de localización violan o no la privacidad de los clientes.
La compañía Credit Acceptance Corporation divulgó mediante un comunicado que la Comisión Federal de Comercio le exigió aclare sus "políticas, prácticas y procedimientos" relacionadas con el dispositivo llamado "interruptor remoto de encendido por GPS", el cual se usa para bloquear a distancia el arranque del motor de un auto.
Abogados del sector de ventas de automóviles dijeron que la mencionada exigencia es parte de una investigación más amplia de la Comisión Federal de Comercio hacia la tecnología de localización empleada en el mercado.
Un portavoz de la agencia se negó a comentar sobre la investigación.
"Saber dónde están ubicadas las personas puede revelar mucho sobre lo que la gente está haciendo en sus vidas", señaló Lauren Smith, abogada del Future of Privacy Forum, un grupo de análisis enfocado en temas de privacidad. "Los datos de ubicación son muy sensibles", añadió.
Si la agencia federal determina que los dispositivos están siendo usados de manera injusta o engañosa, podría obligar a las compañías a detener la práctica y a obligarlas a diseñar procedimientos y monitoreo que protejan la privacidad del cliente.
El escrutinio regulatorio sobre los dispositivos de interrupción de arranque por GPS ocurre en el momento en que el álgido mercado de venta de automóviles experimenta ciertos inconvenientes. El porcentaje de automóviles vendidos mediante préstamos de dinero con por lo menos 90 días de morosidad aumentó a 3,8% en el cuarto trimestre, de 3,6% que estaba en el anterior, según el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.
Para determinar si toman medidas, la Comisión Federal de Comercio debe primero decidir si el beneficio para los consumidores –en este caso la disponibilidad de venta de automóviles– incurre en invasión de privacidad.
La industria del sector dice que los beneficios de los dispositivos son indiscutibles. Sin ellos, muchos estadounidenses de bajos ingresos no podrían comprar autos que necesiten para llegar al trabajo.
Hasta el momento, no existe evidencia generalizada de que los prestamistas usen mal la información que rastrean siguiendo el paradero de un vehículo.
Jack Tracey, director ejecutivo de la National Automotive Finance Association, dijo que los temores sobre privacidad eran infundados.
"Este es un vehículo registrado", dijo Tracey. "Tiene una matrícula y se puede ver dónde está viajando. La persona al volante está conduciendo algo que no es privado en ninguna parte".
Los fabricantes de los dispositivos señalan que tienen directrices claras para proteger la privacidad. Las capacidades del GPS están destinadas a ayudar a los prestamistas a localizar un coche una vez que el prestatario entra en default, no para ser utilizado simplemente como una herramienta de vigilancia, sostuvieron.
Como una protección adicional, agregaron algunos fabricantes, construyeron sus dispositivos de modo que el GPS no se active hasta que un cliente incumple con un pago.
Pero expertos en privacidad y muchos prestatarios que tienen los dispositivos en sus automóviles dicen que hay un gran potencial para el abuso, sobre todo porque los dispositivos "caen fuera" de las leyes tradicionales de préstamos estatales y federales.
Algunos encuentran inquietante que la tecnología otorgue a los prestamistas tanto control sobre los prestatarios, en particular los prestatarios pobres, que normalmente no tienen otra opción que aceptar el dispositivo si quieren un préstamo para comprar un automóvil.
"No necesitan saber lo que estamos haciendo, cuando salimos a comer, cuando salimos de vacaciones", se quejó Elías Sánchez, un operador de montacargas en Austin, Texas. "Queremos nuestra privacidad", remarcó. Su vendedor de autos no le dijo que un dispositivo de rastreo GPS había sido instalado en su Ford SUV 2005.
Una investigación del 2014 publicada por el The New York Times destacó la tecnología de rastreo. En un artículo de primera plana, el jefe de cobranzas morosas de una cooperativa de crédito de Louisiana dijo que podía controlar el paradero de un vehículo en su teléfono inteligente y que una vez desactivó el encendido de un prestatario mientras compraba en un Walmart.
Una madre en Las Vegas describió en el artículo cómo había sido incapaz de llevar a su niño febril a un hospital porque su coche no arrancaba debido a que incurrió en mora. Otros prestatarios se han quejado en las entrevistas de ser varados, abandonados en barrios peligrosos y separados de sus coches cuando más lo necesitaban. En Nevada, una mujer testificó ante la legislatura que su auto había sido apagado en plena autopista.
Algunos legisladores estatales han tomado nota del asunto. La Legislatura de Nueva Jersey está trabajando para revisar un proyecto de ley, vetado este mes por el gobernador Chris Christie, que fortalecería los requisitos de divulgación y agregaría protecciones al consumidor a los dispositivos de bloqueo por GPS. Bajo el proyecto de ley, los consumidores recibirían declaraciones escritas de que un dispositivo había sido instalado en su automóvil y que, por lo menos con 72 horas de antelación, serían notificados de que el arranque del auto sería inhabilitado.
La Comisión Federal de Comercio ha presentado varias medidas regulatorias contra las empresas en los últimos años por violaciones de la privacidad.
En el 2013, la agencia actuó en contra de un grupo de empresas de alquiler –con opción de compra– y una empresa de software para espiar a los clientes que alquilaban ordenadores portátiles. La agencia dijo que las compañías habían usado el software para tomar capturas de pantalla de información confidencial y personal, registrar las pulsaciones de teclado de los clientes y tomar capturas de pantalla de las personas en sus hogares. Se prohibió a las compañías recolectar secretamente estos datos de sus clientes.
La agencia federal dijo también que los automóviles son parte de la expansión del "Internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés)" que está constantemente transmitiendo datos potencialmente sensibles a través de la red. La agencia había estado instando a los fabricantes de automóviles, entre muchas otras industrias, para que presentaran nuevas salvaguardias a los datos personales.
Se espera que la privacidad continúe siendo un eje de trabajo de la Comisión Federal de Comercio, aun cuando varios miembros nuevos deban ser nombrados durante la administración de Trump.
"Las cuestiones de privacidad parecen reunir apoyo bipartidista", dijo Christopher Kukla, vicepresidente ejecutivo del Centro de Préstamos Responsables, un grupo de investigación y promoción centrado en la financiación al consumo. "Vamos a tener que ver si eso es algo que será capaz de seguir adelante", finalizó.