Un profesor de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) fue acusado de supuesto acoso sexual por 6 docentes paraguayas becadas por el gobierno para estudiar una maestría. Ni bien se hizo público el caso el docente fue apartado del cargo y la institución ya abrió un proceso de sumario de manera a aclarar la denuncia.
El docente fue apartado "de forma cautelar" de la docencia del masterado aunque mantiene sus clases de grado en la facultad, según publicó El Mundo.
La amenaza fue de que tendrían "malos resultados académicos" si no accedían a verse con el docente fuera de la clase, ya que el tenía fuertes influencias dentro de la casa de estudios.
La denuncia fue realizada hace ya 3 semanas por 6 estudiantes, que son profesoras en Paraguay y en España están becadas por el gobierno paraguayo para completar su formación.
El rector de la UCM, Carlos Andradas, pidió a la Embajada de Paraguay un encuentro con el ministro de Educación de dicho país, Enrique Riera, cuando éste visitó España al inicio de año para hablar del programa de becas. En ese encuentro, le pidió disculpas en nombre de la institución, señaló por su parte el diario El País de España.
Protocolo
El protocolo indica que una vez presentada la denuncia, se designará en un plazo no superior de siete días a la persona experta para realizar el peritaje, quien dispondrá de 21 días para realizar un informe.
A finales de diciembre entró en la Unidad de Igualdad de la Universidad una denuncia de unas alumnas por el comportamiento de un profesor que podría tener indicios de acoso sexual, por lo que la universidad puso en marcha el protocolo de actuación contra el acoso sexual recientemente presentado en Consejo de Gobierno.
En un plazo de no más de un mes desde la presentación de la denuncia, la Dirección de la Unidad de Igualdad de Género convocará a la Comisión, que debe presentar su informe al rector en un plazo no superior a 14 días desde su celebración.
Ya desde el inicio de curso, en octubre, el profesor comenzó a enviarles mensajes por WhatsApp y Facebook a cada una en privado para "verse afuera y salir". Los mensajes "se repitieron con mucha insistencia", aunque tras los rechazos vinieron las amenazas, según la denuncia.