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Resistencia, Argentina

A lo largo y ancho del campamento del Dakar montado en el autódromo de la ciudad argentina de Resistencia, encontrar las carpas de los pilotos es toda una odisea. Cuando salimos a la caza de los paraguayos, nos encontramos con Milciades Fretes cómodamente sentado y disfrutando de un refrescante tereré bajo la cara del equipo "DK429 Competition", que asiste a las duplas Thomas Engert-Hans Thiede y Beto Recalde-Juanjo Sánchez.

Relajado y con el semblante feliz, el denominado "pionero" por haber sido el primer paraguayo en terminar el Dakar (en su primera participación), ya solo estaba disfrutando de la sensación del deber cumplido. ¿Cuál? El haber llevado el rally más famoso, prestigioso y duro del mundo a su país.

"Cuando me propuse correr el Dakar, me propuse hacerlo con nuestra bandera en la mano y cuando pude terminar mi primer Dakar dije: ahora quiero estar en mi país con la bandera en la mano con el Dakar. Llevó su tiempo, pero estoy convencido que así como vi transformaciones en otros países en donde hubo un antes y un después del rally Dakar, también en Paraguay va a haber un antes y un después del Dakar", afirma Fretes, en entrevista concedida a La Nación.

El propulsor del Dakar en Paraguay no duda en manifestar que "este es el evento, llamale deportivo o como quieras, más grande de la historia del Paraguay" y recalca que "si algún gobierno paraguayo quisiera promocionar el país al mundo entero, se calcula que se necesitan cien millones de dólares para todo lo que nos da el Dakar". "Entonces, lo que recibimos a cambio de lo que se invirtió es infinitamente superior", agrega.

Lo hecho por los propios pilotos, al hablar de Paraguay en todo el tiempo que estuvieron en el país, hizo que Milciades Fretes recordara la conversación que mantuvo días atrás con uno de ellos: "Hay un piloto europeo que me dijo: yo salgo de mi país este año, tengo previsto mudarme a tal país de Sudamérica, pero de Paraguay no tenía idea. Me dijo que vio el producto interno bruto, la producción de carne, la soja y que no sabe cómo tenemos una flota naviera tan grande si somos un país mediterráneo. Le dije: Tenemos los ríos Paraguay y Paraná. Entonces me pidió por favor que le llevara a conocerlos, porque no tenía idea de cómo era nuestro país. 'Me estoy cuestionando seriamente si ir a vivir a ese país o venirme acá (Paraguay)', me dijo", relató.

Con ese ejemplo además, Fretes recordó "lo que siempre dije que se podía dar, que podía haber un antes y un después y poder mostrar todo lo que somos como nación, nuestra cultura, idioncincracia, gastronomía". "Mucho de lo que se vio ayer, la gente no tiene ni idea de todo lo que hay detrás, toda la gente que trabajó anónimamente", aseguró.

Cuando se le recuerda que bien pudo haber seguido corriendo, sin embargo bajó del auto para traer el Dakar a Paraguay, Fretes confiesa que sus hijos le "preguntan siempre: ¡papá, porqué haces esto?, y yo les respondo: alguien tenía que hacerlo".

"Yo conocí esto en el 2009. Conocí desde afuera, luego desde adentro y ahora conocí internamente lo que es la organización. Aprendí mucho en estos tres años de trabajar con Mass Eventos y la ASO. El nivel de trabajo es muy profesional. Nosotros los paraguayos todavía somos muy informales en muchos aspectos, y realmente es un placer trabajar con este tipo de perfección", agregó.

Luego, recalcó el trabajo hecho por los propios paraguayos asegurando que "es un orgullo poder trabajar con gente de la Policía Nacional, la Policía Caminera, la Municipalidad de Asunción, la Municipalidad de Luque que hizo un trabajo excelente, la municipalidad de Atyra, ciudad que hoy estuvo engalanada como nunca, Seme que hizo un trabajo de coordinación y seguridad con un profesionalismo increible, nuestras Fuerzas Armadas, Fuerza Aérea, los jóvenes del Ministerio de Turismo y el Ministerio de Deportes para quienes desde mayo no hubo sábado, domingo o feriado, la gente involucrada desde los Ministerios, el equipo de Migraciones que desde el 25 de diciembre ya se instaló en el aeropuerto y en Puerto Falcón".

"Es un orgullo trabajar con paraguayos tan profesionales que hicieron un trabajo excelente por un paraguay mejor, que es lo que busco yo en particular y todos en general", insistió Milciades Fretes, sin dejar de mencionar al personal de limpieza que trabajó en la Base Aérea y la Costanera.

"Sorprendimos como nación a muchos y esperemos que esto sea un cambio. Creo que tenemos las condiciones y que mucha gente que no creyó en esto hoy cambió su opinión. Demostramos, y me incluyo porque trabajé en el Equipo País, que Paraguay está para hacer grandes eventos a nivel internacional", agregó, aunque reeconociendo que "necesitamos tener más condiciones aéreas a nivel internacional" para seguir recibiendo eventos de esta envergadura.

Consultado si ya conversó con las principales autoridades del Dakar sobre la Etapa 1, disputada en el Departamento de la Cordillera, Fretes dijo que aún no, pero destacó que "el comportamiento del público fue excelente, primó la cordura de la gente y estamos en boca del mundo mostrando lo mejor de nosotros".

Aunque no hubo una conclusión oficial, el resultado parece haber sido tan positivo que hasta al propio Milciades Fretes le dieron ganas de volver a subirse al auto para la próxima edición del Dakar.

Primero, djo que "depende varios factores y también de la gestión del gobierno" volver a albergar el rally raid más duro del mundo, que se encargó de recordar que "el Dakar Paraguay todavía no terminó. El Dakar Paraguay Bolivia Argentina termina el 14 de enero en Buenos Aires, y allá vamos".

"Vamos a dar toda la vuelta con el equipo. Estamos preparados para el calor, la lluvia, el frio y queremos que todas las tripulaciones paraguayas, que es algo que nos trazamos como meta, puedan arribar el próximo 14 de enero a Buenos Aires", mencionó, para finalmente soltar la sorpresa: "Creo que cumplí, así es que estamos analizando seriamente volver al volante porque es una tentación muy grande".

¿Volverá el Dakar a Paraguay en 2018? ¿Volverá el pionero a subirse a un auto para disputar su tercer Dakar? Primero, a esperar que acabe la edición 2017, que entró en la historia del Paraguay.