La Paz, Bolivia. AFP.
"El avión debería reabastecerse en Bogotá", pero siguió su curso hacia Medellín, afirmó Gustavo Vargas al diario Página Siete.
El piloto reportó estar "en falla eléctrica total y sin combustible" minutos antes de caer en las montañas cercanas a Medellín, según una grabación difundida en medios colombianos.
"Señorita, Lamia 2933 está en falla total, ¡falla eléctrica total, sin combustible!", dijo poco antes del desenlace el piloto Miguel Quiroga a la torre de control del aeropuerto de Rionegro, que sirve a Medellín, en Colombia.
"El piloto es el que toma la decisión. Pensó que le alcanzaba el combustible. En el plan de vuelo estaba la opción que la nave entre a Cobija (frontera boliviana con Brasil), pero luego se habló de Bogotá para reabastecerse", insistió Vargas.
Una investigación al respecto está en curso por las autoridades colombianas a las que se sumarán técnicos de la boliviana Dirección General de Aeronáutica Civil. "Tenemos que investigar por qué (el piloto) tomó la determinación de irse en forma directa a Medellín", sostuvo Vargas.
Lo que más ha llamado la atención de los expertos es la autonomía del Avro RJ85 de la aerolínea Lamia, la que llega hasta los 2.965 kilómetros. Y la distancia entre Santa Cruz de la Sierra (el origen del vuelo fatal) y Medellín abarca un total de 2.965 kilómetros. Vale decir, márgenes muy justos para actuar en una situación de emergencia.