Un grupo de convencionales oficialistas de la Asociación Nacional Republicana (ANR) exigió a la Junta de Gobierno que se aplique las sanciones establecidas por la Convención a los legisladores disidentes que vayan contra las posturas del partido e incumplan el mandato partidario. No ahorraron las críticas y los improperios al referirse al sector disidente, Colorado Añetete, liderado por Mario Abdo Benítez.
El diputado Clemente Barrios, quien presidió la última Convención colorada, cuestionó a los legisladores disidentes quienes presentaron una acción de inconstitucionalidad en contra de la resolución de la Convención ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ). "Si no se respeta los estatutos del partido, las resoluciones de su suprema autoridad, que es la Convención, ya no tenemos nada que hacer dentro de nuestro partido", argumentó.
La moción fue secundada por una veintena de convencionales que criticaron duramente al sector Añetete por el acercamiento a los partidos y agrupaciones políticas opositoras al gobierno.
Rosa Sanabria, una de las convencionales, pidió al presidente del partido, Pedro Alliana, que no le tiemble la mano para dar el mandato al Tribunal de Conducta para tomar acciones contra el grupo disidente. También cuestionó que los disidentes vuelvan a candidatarse por el partido en las elecciones nacionales y sostuvo que el titular del partido no debe permitir este hecho.
Los más criticados fueron los senadores Abdo y Juan Carlos Galaverna, este último a quien Aida Molinas, una de las convencionales, calificó de "lepra" y "traidor". En tanto que varios de los asambleístas tildaron al líder de Colorado Añetete de "niño mimado" y "niño de cuna de oro".
Ante el pedido de los convencionales, la Junta de Gobierno resolvió dar el mandato a los apoderados partidarios de interiorizarse sobre la acción de inconstitucionalidad presentada ante la Corte. Igualmente, se instó al Tribunal de Conducta accionar si así se requiere hacia los colorados que incumplan el mandato partidario.