Antes de decir "presente" en el box de entrenamiento de esta disciplina, hay algunos puntos a tener en cuenta. El head coach del Mbarete CrossFit de Rakiura, René Soto, nos cuenta qué no debemos pasar por alto.
Por: Micaela Cattáneo
Hay tantas frases motivacionales recorriendo las redes sociales hoy en día, que resulta difícil volver a encontrarlas, si es que no las guardaste en la memoria interna de tu teléfono. Sin embargo, siempre existe alguna que –aunque no la hayas descargado- es imposible que se escape de tu mente; en mi caso sería: "El que no encuentra tiempo para ejercitarse tendrá que encontrar tiempo para la enfermedad".
Un poco fuerte ¿no? Aunque con un mensaje justo para aquellos que siempre presentan excusas a la hora de adoptar un estilo saludable. Y cuando decimos saludable, no necesariamente hacemos referencia a un plan nutricional que nos haga bajar de peso, sino a una nueva forma de vivir que incluya prácticas que mejoren nuestra calidad de vida, nuestra salud.
El CrossFit podría ser una de ellas. Si bien esta disciplina empezó como una serie de ejercicios que Greg Glassman utilizaba en California para entrenar a policías de su ciudad, con el tiempo terminó siendo un deporte muy popular en el mundo y que puede practicarlo desde un niño de 6 años hasta un adulto entrado en años. Si estaba en tu lista de espera de "Deportes a elegir", te enumeramos los aspectos a tener en cuenta antes de ir a tu primera clase.
Buscar información sobre el entrenamiento
Sin conocimiento previo del deporte, difícilmente la disciplina se vuelva constante. La información a determinar va mucho más allá del simple "¿qué es?", aunque esta pregunta necesariamente sea el punto de partida. El CrossFit es un entrenamiento funcional variado que se realiza a un nivel de alta intensidad; tanto para un principiante (que nunca hizo CrossFit o actividad física en sí) como para un atleta.
"Es graduable de acuerdo al estado físico en el que se encuentra la persona que lo está practicando. Es decir, si bien son clases grupales, la planificación es individual. En una misma clase pueden haber personas con distintos estados físicos, distinto nivel de conocimiento de la técnica o capacidades; sin embargo, el entrenador se encarga de individualizar esos ejercicios de manera progresiva", señala el coach.
Por "funcional" entendemos a los movimientos que realizamos en nuestro día a día. "Generalmente, nos acostumbramos a tomar posturas incorrectas, por ende, sentimos dolor o nos lastimamos cuando queremos mover un mueble o alzar bolsas", refirió el especialista.
"El CrossFit sirve para desarrollar estas actividades cotidianas de una mejor manera; desarrollamos capacidades que son natas en el hombre como la resistencia muscular y cardiovascular, la fuerza, potencia, velocidad, coordinación y agilidad", añade.
Fijar un objetivo
Una de las frases más escuchadas por los alumnos que se inician en la práctica es :"Quiero bajar de peso"; pero René nos dejó muy en claro por qué este no debe ser el principal motivo: "Existen mil y un formas de bajar de peso, que no siempre traen salud. El box del CrossFit no es un espejo o una báscula. Los logros se valoran de acuerdo a los progresos, a la satisfacción de poder hacer lo que antes no podías".
Son tres las metas a las que podés llegar con esta disciplina: En primer lugar, salud, luego condición física y, por añadidura, la apariencia física.
Hacerse un chequeo médico
Este paso es fundamental antes de asistir al primer entrenamiento. El médico determinará si es o no conveniente, según el estado de salud, iniciarse en el deporte. En caso de que dé el ok, el alumno estará sujeto a la evaluación del coach para saber cuál es su condición física y de acuerdo a eso armar un plan de entrenamiento.
"El CrossFit no es un deporte para atletas de alto rendimiento, sino para personas que busquen serlo. No está direccionado específicamente para eso, pero sí para cualquiera que desee mejorar su calidad de vida", subraya.
No pretende que el atleta se especifique en algún deporte. "No buscamos el hombre que levante más peso, el que corra más rápido o el que salte más. La idea es equilibrar, que el atleta sea lo suficientemente bueno en todo sin descuidar otras áreas", puntualiza Soto.
Cambiar la alimentación
Lo necesario para esta disciplina es mantener una ingesta de carbohidratos que genere la energía para poder entrenar a un nivel alto. "Lo esencial es ir a un nutricionista deportivo. Pero lo que suele pasar es que mucha gente viene con la idea de bajar de peso, disminuye su consumo de carbohidratos y come solamente proteínas; por ende, se sienten más cansados de lo que están", ejemplifica.
Dejar de lado al ego
Muchas personas hablan de que el CrossFit es lesivo y eso se debe, generalmente, a la imprudencia del atleta. "El ego es el principal enemigo del entrenamiento", indica el entrenador acerca de los que pretenden saltar etapas en tan poco tiempo. "El querer evitar fases nos lleva a sobretrabajar el cuerpo y como consecuencia de ello aparece la fatiga muscular", agrega.
Entrenar en familia
El CrossFit es para todas las edades y, en ese grupo, no están excluidos los niños. "La práctica en los menores de edad también es progresiva porque sabemos que se encuentran en etapa de crecimiento. Los cartílagos no están desarrollados, los músculos no son lo suficientemente fuertes; pero se buscan ejercicios que mejoren sus capacidades sin que estos los golpeen", refiere sobre la modalidad para los más pequeños.
Además, el CrossFit a nivel mundial es una comunidad, genera un grupo y un sentido de pertenencia muy fuerte y, eso, para los especialistas en el tema es "extremadamente motivacional". "Los compañeros apoyan a todos los que están en la clase, esta es una de las razones por las que esta disciplina no tiene tanto abandono. La idea de progresar es un objetivo en común", finaliza.
+INFO
Gym & Wellness Center: Rakiura Club (Luque). Tel.: (021) 645 021.