Un hombre fue condenado a una pena de 11 años de cárcel, luego de que la justicia paraguaya lo hallara culpable del hecho punible de robo agravado. Según refieren las investigaciones, el ahora condenado solicitó el servicio de un taxista en la ciudad de Capiatá para que lo trasladase por varias ciudades del departamento de Paraguarí, pero con la intención verdadera de despojarlo de todas sus pertenencias.

El hombre, identificado como Alfonso Torres, llegó el 19 de diciembre del 2014 hasta la parada de taxi en la que se encontraba de turno el conductor Éver Armando Pérez Muñoz, a quien solicitó que lo trasladase hasta la ciudad de Acahay.

En el trayecto hicieron una parada de aproximadamente 30 minutos en un domicilio particular en donde abordó una segunda persona. De allí pidieron ser llevados a la ciudad de Sapucai. En un momento dado, el vehículo de alquiler sufrió un desperfecto mecánico, motivo por el cual una patrullera que se encontraba en las inmediaciones los remolcó hasta una estación de servicios en la que recibieron la asistencia mecánica.

SIGUEN LOS HECHOS

Una vez solucionado el problema siguieron su camino y al llegar a una zona desolada el delincuente exigió al chofer que entregue todas sus pertenencias, amenazándolo de muerte. Así se apoderó del celular de la víctima y también de dinero en efectivo, producto de la recaudación de día. Tras perpetrar el robo los fascinerosos se dieron a la fuga.

Pérez se presentó a la comisaría de Paraguarí donde presentó la denuncia correspondiente y se dio parte al Ministerio Público. Tras un trabajo de inteligencia se logró la captura del delincuente quien, finalmente, fue imputado por el fiscal Guillermo Ortega por el hecho punible de robo agravado.

Durante el desarrollo de la audiencia, el representante del Ministerio Público presentó diversos elementos probatorios que fueron valorados y juzgados por los miembros del tribunal colegiado que, en esa ocasión, estuvo integrado por los magistrados Gerardo Ruiz Díaz, Hugo Ríos y Jorge Giménez.