Con un profundo dolor, ayer despidieron a otros 4 de los 8 militares asesinados en una emboscada atribuida al grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), atentado ocurrido el sábado en la zona de Arroyito, departamento de Concepción.
Los familiares, amigos y camaradas del vicesargento 1º Genaro Dejesús Arias Palacios despidieron ayer al militar en el cementerio de Limpio. En representación del Gobierno estuvo el ministro de Defensa, Diógenes Martínez y otras altas autoridades castrenses. En esa ciudad se decretó duelo por 3 días tras el fallecimiento del oficial que vivía en la zona. Su sepelio se realizó en el cementerio local.
Además, se realizó el sepelio del sargento 1º de Infantería, Hugo Alberto Candia Benítez, que se dio en Acahay, en la compañía Virgen de Fátima, donde también con el profundo dolor familiares le despidieron como un héroe. El municipio igualmente se declaró en duelo por 3 días y estableció que todas las banderas de las instituciones estén a media asta. El entierro del sargento se postergó un día para que los familiares provenientes de Córdoba y Buenos Aires lleguen al país.
Al sargento primero de Infantería, Robert Cañete Pereira, de Santa Rosa, Misiones, le despidió una multitud de militares, familiares y amigos que llegaron hasta el cementerio local donde se le rindió honores militares.
El oficial chaqueño, sargento primero Eber Ramón Arias, de Mariscal Estigarribia, Boquerón, Chaco paraguayo, fue despedido por sus familiares y militares de su regimiento. El padre de la víctima, Ramón Arias, también es militar, con jerarquía de Suboficial Principal.
Además de los militares mencionados, otros cuatro fueron asesinados el sábado. Ellos son Fernando Fernández, Sergio Daniel López, Robert Cañete y Pablo Farías. Todos ellos son considerados por el Gobierno como héroes y recibieron honores durante su sepultura.