El ministro Agricultura y Ganadería (MAG), Juan Carlos Baruja, indicó que no se justifica el retiro de los campesinos de la mesa negociadora con el Gobierno y tampoco el llamado a una nueva movilización, dado que los puntos contemplados en el acuerdo suscrito por las partes viene cumpliéndose según lo pactado. Ayer dirigentes de los pequeños productores oficializaron el llamado a movilización para el próximo martes 20 de setiembre, en reclamo de la condonación total de sus deudas.

Baruja volvió a reafirmarse en que la actitud que están tomando los campesinos está principalmente orientada por algunos de los dirigentes de la coordinadora quienes están alentados por intereses particulares a esta movilización y no la búsqueda de la solución al problema. "La mesa para nosotros sigue y seguirá abierta y el diálogo seguirá siendo el instrumento para nosotros. Esto más bien tiene una connotación política más que la búsqueda de la solución", insistió.

Recordó que solo falta concretar la compra de las deudas que están en bancos privados, mientras que los que tenían deudas con el Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) ya pueden volver a hacer préstamos, ya que mediante las negociaciones y las gestiones del Gobierno se lograron avances en tales puntos del acuerdo concretado en abril pasado. "El único punto más rezagado es la posibilidad de la compra a través del Banco Nacional de Fomento de las cuentas con el sector privado", dijo.

Con relación a la situación de la deuda que el gobierno debía absorber, el ministro de Agricultura precisó que se cumplió con la transferencia del 100% de los 10.000 millones de guaraníes acordados con las organizaciones campesinas e integrantes de la Mesa Multisectorial, donde 6.025 clientes del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) fueron beneficiados con la refinanciación de sus deudas por un monto superior a G. 23.723 millones y con quita de intereses por G. 13.691 millones.

Mencionó que los beneficiarios también ya cumplieron con el proceso de Educación Financiera y demostraron a través de certificados del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) la tenencia de tierras productivas, por lo que tienen la solvencia de afrontar nuevos créditos para próximas producciones.