El Ministerio Público allanó anoche el domicilio de una farmacéutica con relación al caso de una joven de 17 años, quien habría sido obligada a interrumpir un embarazo de tres meses de gestación. En el lugar se encontró una clínica clandestina para abortos, que fue inmediatamente desmantelada.
Según el reporte de la 970 AM, el hecho se registró en el barrio San Roque de Presidente Franco, en Alto Paraná. Fueron detenidos en el procedimiento Adalberta Rodríguez (67), quien supuestamente realizaba prácticas abortivas en forma clandestina y Gabriel Zarza Benítez (28), novio de la adolescente que bajo engaños la había llevado desde Salto del Guairá hasta Ciudad del Este para abortar.
La fiscal Analía Rodríguez, en conversación con la 970 AM, señaló este jueves que tienen informes médicos que constatan que la joven efectivamente interrumpió su embarazo.
"Hay indicios suficientes para formular imputación por el aborto, quien realizó maniobras con la joven, exponiéndola a peligro de muerte y más aún, no teniendo su consentimiento", dijo a la gente fiscal. Adelantó que la mujer se expone a una pena privativa de libertad de 8 años.
Rodríguez comentó que durante el procedimiento hallaron elementos quirúrgicos habituales en prácticas abortivas, así como medicamentos que serán sometidos a una pericia.
La denuncia fue realizada por la madre de la menor de 17 años, quien está internada en un centro de salud de Salto del Guairá. Aún se desconoce su estado actual de salud.