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El Nuncio Apostólico Eliseo Ariotti habló sobre el caso de censura de la serie de publicaciones que el equipo de investigación del diario La Nación sacó a la luz bajo el nombre de "Iglesia Oscura", en la que se dejaba al descubierto como sacerdotes argentinos denunciados por abuso sexual a niños eran escondidos en Paraguay por autoridades de la iglesia católica en nuestro país.

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Monseñor Ariotti reconoció a Canal 13 RPC que realizó un llamado telefónico a la propietaria del Grupo Nación de Comunicaciones Sarah Cartes, pero que no pidió expresamente que la investigación se dejara de publicar, sino "que se me permita aclarar lo que pasó".

Ariotti dijo que le comentó a Sarah Cartes que estas publicaciones lo dañaban moralmente, pero que no expresó que le dañaban la carrera.

"No era oportuna la publicación, fue nomás fue lo que le dije a Sarah Cartes", siguió la alta autoridad de la Iglesia Católica en nuestro país.

En otra parte de la entrevista, en Nuncio Apostólico dejó en claro que los periodistas de La Nación primero le debían entregar los documentos con los que contaban antes de publicarlos.

"¿Por qué si periodistas de LN sabía de documentos no vinieron a pasármelos?. Solo en abril me pidieron aclaraciones del caso que estaban investigando. Este caso debía ser primeramente estudiado, los documentos eran fotocopias y mensajes de mail", lamentó en otro momento Nuncio Ariotti.

A pesar que las publicaciones dejaron al descubierto que uno de los sacerdotes, Carlos Richard Ibáñez Morino, alias "Richardi" se encontraba en Paraguay desde la década de los 90 e incluso estuvo por Tacumbú, Ariotti comentó que no conocía sus antecedentes.

"Yo denuncié al obispo lo que sabía. Nosotros cuando llamamos al sacerdote involucrado le pedimos que se ponga disposición de la justicia. Depende de la persona involucrada ponerse a disposición de la justicia", dijo Ariotti.

Posteriormente el Nuncio se explayó sobre el proceso que sigue a un sacerdote sospechado de cometer algún ilícito, expresando que la Iglesia Católica no busca esconder a nadie.

"El derecho a la defensa es también sagrado, la justicia va adelante y nosotros no hacemos nada. Una vez que el sacerdote baja al laicismo la justicia debe empezar a investigar. Esto no toca a la nunciatura, cada sacerdote depende de su obispo. La justicia civil por ejemplo en Guairá ya estaba actuando".

El cese de la publicación que debía contar con otra serie de ediciones, generó el repudio de los periodistas de varios medios de comunicación, con sendas manifestaciones de comunicadores frente a ABC Color, Última Hora y del mismo plantel de profesionales de La Nación.

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