Por Pedro Gómez Zorrilla

Libertad se rehabilitó de dos derrotas consecutivas y salió airoso en el compromiso ante River Plate. Estaba en desventaja en gran parte del partido, pero tuvo la necesaria tranquilidad para buscar el mejoramiento y eso determinó la paridad y luego los dos tantos que le permitieron un triunfo, hasta si se quiere abultado.

Luego de varios intentos para vencer la defensa impuesta por el "Popi" Rodrigo Muñoz, Julio Trinidad, aprovechando una gran acción de Wilfrido Britos, puso al Kelito al frente del marcador y empezaron a aflorar los nervios de los aficionados albinegros.

El muy resistido entrenador de los liberteños, Eduardo Rivera, recurrió al ingreso de Rogerio Leichtweis por el juvenil Jesús Medina y éste delantero llegó a la igualdad luego de un centro de Ángel Cardozo Lucena, desvió Antonio Bareiro, y Rogerio se adelantó a Arístides Florentín para marcar el empate.

Continuó el dominio de los albinegros en busca del ansiado tanto del desnivel y apareció la contundencia de Santiago Salcedo, quien llegó a su segunda conquista con la casaca gumarela, para permitir que su equipo sea el ganador parcial.

Intentó River Plate la igualdad, pero sin muchas ideas, y para colmo de males en forma infantil se hace expulsar Armando González, por un pisotón en contra de Jorge Moreira. En los últimos minutos del descuento, Wilson Leiva, aumentó la diferencia para Libertad, por un error del arquero Arístides Florentín.

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