Paraguay ya dispondrá de vacunas contra la leishmaniasis canina a modo de prevenir la enfermedad en el animal. Los biológicos llegarán la próxima semana y su compra fue gestionada por las veterinarias privadas, según informó el doctor Raúl Tuma, propietario de la clínica Tacuary.
El profesional explicó que el tratamiento es preventivo y consiste en la aplicación de tres dosis consecutivas y una de mantenimiento cada año.
"Todo lo que es vacuna tiene también su pro y su contra, porque es un producto biológico, no va a ser 100%, pero por lo menos ya da una protección. Eso se hace previo análisis de leishmaniasis en los perros con el método de Elisa. Una vez que tengamos el resultado que sea positivo, y eso puede comenzarse a partir del cuarto o quinto mes de vida del animal", refirió.
Tuma dijo que el esquema consiste en la inoculación de una dosis cada 21 días, son tres dosis y se repite al año. "Es como una vacuna anual después. Y es preventiva la vacuna, para el esquema de tratamiento hay otro esquema que utilizamos nosotros como el Alopurinol, son drogas que se utilizan para ese tipo de casos", acotó.
Según el veterinario, lo importante para la persona que tenga un animal con leishmaniasis es saber que si no está enfermo puede prevenir con la vacuna, o si no "proteger por lo menos a través de collares o con productos especiales".
El costo estimativo de la vacuna sería G. 350.000 por dosis. A su criterio, el Ministerio de Salud debería incorporar dentro del programa de inmunización la compra de los biológicos para que puedan ser aplicados a los animales.
"Hace años que nosotros estamos luchando con esto, primero se hizo una campaña para ver el tipo de flebótomo, la captura, el tratamiento, pero no se hizo nada".
Por último, Tuma anunció que la próxima semana la Clínica Tacuary ya contará con la vacuna en cuestión, que es de procedencia europea.
SÍNTOMAS
La leishmaniasis es una enfermedad transmitida por un flebótomo conocido comúnmente como karachã. El reservorio de esta enfermedad parasitaria es el perro. Un perro con leishmaniasis visceral puede aparentar estar sano, pero si tiene los parásitos sirve como fuente de contagio. Si un perro presenta caída de pelo, pequeñas úlceras en la piel, adelgazamiento, crecimiento exagerado de las uñas, decaimiento, es muy probable que sufra de leishmaniasis visceral.
En las personas la enfermedad se manifiesta con fiebre alta y prolongada por varias semanas, además de debilidad, tos seca, abultamiento del abdomen y pérdida importante del peso. El riñón, el hígado y el bazo son los órganos más afectados por el parásito.