Por Armando Giménez

El presidente del Banco Central del Paraguay, Carlos Fernández Valdovinos, accedió a una entrevista para La Nación, en la que aclaró varios puntos sobre el proceso de liquidación de Ára SA de Finanzas, cuya inspección por la banca matriz ya empezó en el 2013. Para el ejecutivo, hubo mala fe para el vaciamiento y que eso escapa a toda supervisión, pues se puede realizar en 30 minutos, como en este caso abrieron la caja fuerte, sacaron todo el dinero y dejaron vales a nombre de ciudadanos brasileños.

Explicó que muchas cosas no se podían dar a conocer públicamente, porque la ley actual no permite. Afirmó que se está impulsando la reforma de la ley, para que se puedan mejorar las falencias o debilidades. Resaltó en especial el cambio de los miembros de directorio de una entidad regulada, que deben informarse al BCP. La nueva normativa incluirá la palabra "integridad" para que una persona pueda ser directivo de un ente. También destacó la buena solvencia del sistema financiero actual.

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–¿Cómo está el Sistema Financiero hoy?

–El sistema está muy solvente. Creo que es uno de los sistemas financieros más sólidos de los últimos tiempos, con niveles de capitales suficientes para poder afrontar los problemas que surgen por el deterioro de las condiciones externas. Siempre habrán sobresaltos, como el que ocurrió recientemente (Ára), que fue de una entidad muy pequeña pero fácilmente controlable, desde el punto de vista sistémico. Lo vemos bien, y con suficiente fuerza para seguir contribuyendo con el crecimiento económico del país.

–¿ Se visualiza una vulnerabilidad, tras el caso de Ára?

–Al contrario. El Banco Central tiene los mecanismos y actuó prontamente ante el caso de esta financiera. Algunos dijeron que no se actuó rápido, y no fue así, porque simplemente no conocen la historia por detrás. Hay una serie de disposiciones legales que no nos permiten hacer públicos muchas cosas. Pero en el caso particular de esta financiera pequeña, el BCP ya empezó a hacer su primera inspección en mayo del 2013. A partir de ahí, el BCP empezó a poner una serie de recomendaciones, de tal manera a fortalecer el capital operativo de esta entidad. A partir de esta resolución, sí pudimos empezar a hablar, pero tenemos pruebas y constancias de cartas, desde mayo del 2013.

Tenemos restricciones legales. No podíamos anunciar que esta entidad (Ára) estaba en proceso de regularización, porque la ley no nos permite. Tampoco no nos permite hablar de sumarios que les habíamos hecho, pero el BCP ya tenía a la entidad bajo vigilancia desde la inspección del 2013.

–¿Usted dijo que en diciembre del 2013 ya habían detectado falencias?

–Era una serie de falencias, por eso dije que lo de diciembre del 2013 era uno de los puntos, pero la inspección empieza desde mayo. Hay cartas que podemos mostrar oportunamente, con respecto a diferentes recomendaciones que hacía la Superintendencia de Bancos(SIB) a esta entidad. Lo que se hizo en diciembre fue terminar la inspección y se elevó una recomendación de sumario al directorio del BCP. Allí empezó el sumario a Ára que terminó en mayo. Después pidieron una reconsideración, en donde se ratificaron. Luego esto se elevó a la justicia, porque apelaron.

Estamos hablando de 1 año y 3 meses, antes de lo que salió publicado en la prensa, que supuestamente motivó a toda nuestra reacción. Es totalmente errada, porque en la larga historia. Estamos con la conciencia tranquila, se hizo bien las cosas, en donde se muestran las fortalezas del BCP y también las debilidades.

–¿Y cómo se dio lo del vaciamiento?

–Ahora bien, lo último que sucedió, de indicio de fraude o de vaciamiento, es algo que nada tiene que ver con una supervisión preventiva. Eso es un delito y muy difícil. Lo que se hizo fue abrir la caja, se quitó todo el dinero (US$ 14,3 millones) y dejaron unos vales. No puedo estar sentado ni la SIB frente a esa caja fuerte durante las 24 hs y los 7 días de la semana, para saber cuándo se hace eso. El vaciamiento se puede realizar tan rápido, como en 30 minutos. El vale es del mismo monto de lo que quitaron, pero con ningún valor y sin respaldo. El pagaré creo que son de unos brasileños con cédulas brasileñas, que no tienen ningún tipo de valor. Es tan difícil que el supervisor esté allí cuando hay mala fe, y eso es aquí como en EEUU.

–¿Lo hicieron vía sistema la salida de dinero?

–No, porque no figuraban en el balance. Cuando empezamos a cotejar lo que dice el documento y a pedir pruebas de que ese dinero existe, allí es que saltó. En 24 horas resolvimos la liquidación de la entidad, por lo que fue un movimiento rápido. Recalcó que la SIB reaccionó rápido, porque desde mayo del 2013 estaba detrás.

–¿Cuántas personas están hoy inhabilitados dentro del sistema?

–La SIB tiene la cantidad de personas inhabilitadas después del caso del BBVA(en el 2012). Ahora lo que nos queda es empezar un proceso administrativo. Aquí van a haber procesos administrativos, civiles y penales. Al BCP le corresponderá ver las responsabilidades administrativas, lo que quiere decir que se hará sumarios administrativos principalmente a los que estaban en el manejo de la institución. Pero después, el área civil y penal estarán en otros campos. Ya está la Fiscalía para eso.

–¿Se tendría que hacer una reforma en la ley?

–Sí, porque hay algunas debilidades en el marco legal corriente, que estamos tratando de mejorar con la reforma que impulsamos. Algunos consideraban que queríamos "súperpoderes", y en realidad no, lo que queremos es un poco de capacidad para prevenir muchas de estas debilidades que estamos viendo. Muchos critican los directorios que aprobamos de los entes regulados. Esto es lo que pasa con la ley: se presenta el directorio inicial y se acepta, luego de dos semanas cambian. Tenemos condiciones de ver y aprobar a gente que entra al inicio, pero no de quien le sustituya. La madre de Carlos Sosa Palmerola no estaba en el directorio original, se incorporó luego, solo estaba como accionista. Nos criticaron cómo es posible que una señora de edad esté en el directorio, también nos preguntamos, pero no podemos hacer nada porque la ley no nos permite. Queremos el mal llamado "súperpoderes" para poder controlar el equipo que entra y el que continuará jugando el partido.

–¿En el área de lavado de dinero?

–En este caso, lo que queremos incorporar a la ley es la palabra "integridad". Esto se refiere a todo lo que tiene que ver con lavado. Esto dará mucha más fuerza a todas las medidas que tomemos para asegurar la integridad del sistema, es decir, que no sea vulnerable a métodos de lavado de dinero.

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