La fiscala Raquel Fernández, quien estuvo encargada de las investigaciones del homicidio del militante liberal Rodrigo Quintana y la imputación del policía Gustavo Florentín, dio su versión ayer a los miembros del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados sobre los trabajos realizados por la Fiscalía.
"Brindé la información que fue requerida por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados en relación al homicidio de Quintana y el policía Gustavo Florentín y otros. Es en relación a la denuncia del senador Petta, relacionada a la negación de la Fiscalía en realizar el pedido de extractos de llamadas entrantes y salientes de varias personas que tuvieron comunicación el 31 de marzo con el ex comandante de la Policía Nacional, el comisario Críspulo Sotelo", explicó.
Dijo que en la resolución fundamentó su negación del pedido del extracto de llamadas. "Allí se encuentran los fundamentos expuestos. No existe ninguna suspicacia, tampoco me presto a colectar elementos de prueba que para mi entender no tienen alguna vinculación directa con el hecho investigado", mencionó.
Agregó que el extracto de llamadas del comisario Críspulo Sotelo ya se tenía desde un principio y todas las comunicaciones que el mismo realizó, ya sean llamadas entrantes desde su teléfono celular como las llamadas salientes y la ubicación del mismo.