El Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), asegura que cumplió con los acuerdos firmados con los campesinos. El titular de dicha cartera, Marcos Medina, aseguró que no se puede asistir a personas no inscriptas en el Registro Nacional de Beneficiarios (Renabe).
Esto con relación al reclamo de la Coordinadora Nacional Intersectorial sobre el cumplimiento de la Ley de Emergencia de la Agricultura Familiar. En ese sentido, recordó el actuar poco transparente de la CNI, que entregó un listado con 62.000 personas. No obstante, mediante el cruzamiento de datos se percataron de que en la nómina figuraban menores de edad, funcionarios públicos y hasta difuntos, que no pueden recibir asistencia estatal.
Además, la mayoría no figura en la base de datos del Registro Nacional de Beneficiarios (Renabe). "No podemos, bajo la presión que ellos quieren imprimir, utilizar los recursos del Estado en personas que no estén realmente habilitadas y verificadas como productores, lo que mucha veces genera la reacción de los campesinos", expresó el titular del MAG.
La Ley de Emergencia de la Agricultura Familiar Campesina –promulgada en agosto del 2017 con vigencia en todo el territorio nacional– tiene vigencia por un plazo de 180 días, que vence el 9 de febrero, para asistencia a productores que fueron afectados por las heladas. La normativa tiene como objetivo atender los problemas de asistencia técnica y crediticia, y de acceso a servicios básicos, vivienda y tierra que afectan a los compatriotas que se encuentran en ese segmento de productores.
Sin embargo, uno de los líderes de la CNI, Luis Aguayo, dijo que desconocían cuántos serían los beneficiados. En principio, se negaron a entregar la lista de beneficiados.
El Ejecutivo llegó a acordar con los campesinos en todas las ocasiones en que presentaron sus reclamos. En principio, se dio la firma del acuerdo para la reestructuración de las deudas, regularización de tierras y proyectos productivos. Dicho acuerdo se firmó en abril del 2016. Posteriormente, los campesinos se volvieron a movilizar el año pasado por varias semanas copando el microcentro capitalino reclamando la condonación de sus deudas.
Ante este nuevo pedido del sector campesino, el Ejecutivo planteó una nueva alternativa considerando que la condonación sería "perversa", ya que los excluiría del sistema financiero, según indicó Amanda León, presidenta del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH). Por ello, se logró el acuerdo de Entendimiento de Rehabilitación Financiera. Dicho convenio establece la quita de intereses, nuevos vencimientos con plazos de hasta 10 años, con dos años de gracia y tasas de interés del 8% anual, para que los productores puedan honrar sus deudas.