Hoy se recuerda 29 años de la caída del régimen estronista y el nacimiento de la era democrática en la República del Paraguay tras la gesta histórica de héroes patrióticos que lograron derrocar a Alfredo Stroessner del gobierno. Stroessner estuvo en el poder entre los años 1954 y 1989, dejando al paso oscuras historias de terror y opresión al pueblo paraguayo con desapariciones forzosas, torturas y asesinatos.
Las cifras que dejó esta parte de la historia quedaron en 423 desaparecidos, 18.772 torturados y unas 20.090 víctimas directas a lo largo de los 35 años de imperio del dictador. Esto de acuerdo con un trabajo de investigación publicado por la Comisión de Verdad y Justicia (CVJ), un grupo que se creó justamente para encontrar datos y testimonios sobre la brutalidad del régimen stronista.
La dictadura stronista fue una de las más largas en toda la región y tal vez la que gozó de mayor impunidad. Otro de los datos terroríficos de esta era fue la tortura a las mujeres, que de acuerdo con los datos publicados por la CVJ fueron casi el 15% de todos los torturados en la dictadura. Según estos informes, tanto hombres como mujeres eran torturados con la misma saña. El rol de la mujer, en el contexto de la dictadura, además adquiere otro matiz dependiendo de su situación social.
Esta nefasta historia tuvo fin en la noche del 2 y 3 de febrero de 1989, conocida como la noche de la Candelaria, cuando un grupo de las Fuerzas Armadas, liderado por el general Andrés Rodríguez (consuegro del dictador), se sublevó contra el entonces comandante en jefe, Alfredo Stroessner. Rodríguez, quien en ese entonces era hombre de confianza, en la mañana del 3 de febrero puso fin a los 35 años de terror en un discurso.
"El momento de la toma de decisiones ha llegado y las Fuerzas Armadas de la República del Paraguay nuevamente han cumplido con su deber a entera cabalidad", decía al inicio de su anuncio, que cambiaba radicalmente la historia del país. Seguidamente, Rodríguez culminó su discurso diciendo que "el general Stroessner se ha rendido, encontrándose en perfecto estado de salud, privado de su libertad, gozando de todos los derechos humanos, en una residencia del 1er. Cuerpo del Ejército". Posteriormente, fue exiliado al Brasil, donde falleció en el 2006 a los 93 años luego de 17 años de su derrocamiento.
LOS PROTAGONISTAS
Muchos fueron los actores de esta gesta, que dio vuelta la página de la historia del terror. Desde los integrantes de las Fuerzas Armadas hasta la ciudadanía, que impidieron con firmeza cualquier tipo de retroceso. Andrés Rodríguez (general), Aníbal Regis Romero (coronel) y Lino César Oviedo (comandante), los tres Carlos y "los Víctor" conspiraron para derrocar al temido Stroessner.
Igual participación tuvieron los militares que respondían a Rodríguez y compañía, quienes hoy piden un régimen de indemnización por su participación y por el heroico gesto. El proyecto de ley se encuentra en el Congreso Nacional y aún no fue tratado por el pleno de la Cámara de Diputados, donde fue presentado.
La iniciativa legislativa surgió debido a que la gesta revolucionaria jugó un papel trascendente en la llegada de la democracia al Paraguay, de acuerdo al documento presentado. La misma también indica que, moralmente, los gestores de esa revolución fueron ignorados, durante años, por el Estado paraguayo.
El proyecto determina que deben ser objeto de indemnización ambas facciones de soldados y policías que participaron en la revolución del 2 y 3 de febrero de 1989, sin discriminación alguna respecto a la facción en la que han combatido.