En San Pedro de Ycuamandyyu vive el adolescente de 15 años que al nacer recibió el milagro de Chiquitunga y volvió a la vida.

Angel Domínguez y su abuela materna Beatriz Peralta, viven en el barrio Santa Ana de la ciudad de San Pedro de Ycuamandyyu. La historia cuenta que el niño que nació muerto y revivió con el milagro de Chiqitunga, por pedido de la enfermera que vio nacer al niño.

Actualmente Ámgel tiene 15 años y dijo estar muy emocionado con la noticia de que será convertida en beata y que es algo inexplicable lo que sucedió con él al nacer, según informó el corresponsal Lorenzo Agüero.

“Creo en Chiquitunga y le tengo como santa, a donde quiera que vaya, siempre me encomiendo a ella”, señaló el joven cursa el primer año de la educación media.

Se trata de una familia humilde que lucha día a día para salir adelante. Angel confesó que su sueño es estudiar Psicología al terminar el colegio. “Si Dios quiere y Chiquitunga”, mencionó el joven.

Por su parte, la abuela materna explicó que siempre estuvieron convencidos de que iba a ser santa. “Antes de que sea nada, yo siempre le tuve como santa porque a nosotros ya nos dio el milagro. Para mí siempre fue santa y me encomiendo a ella para lo que sea. Muchos se burlaban de nosotros cuando decíamos que ella hizo el milagro pero nosotros no hacíamos caso porque sabíamos lo que significaba para nosotros”, contó.

Si bien Beatriz no estuvo durante el momento del nacimiento ni del milagro, le contaron. “Yo no estuve cuando eso pero me contaron. Mi hermana estuvo en el nacimiento y contó que nació muerto y que la Lic. hizo el pedido a Chiquitunga, le pidió el milagro por favor para que reviva porque no sabía qué les iba a decir a los padres. No quería salir a contar que falleció el bebé”, indicó.

La abuela también mencionó que necesitan ayuda porque muchas veces no tienen nada, no alcanza. “Yo tengo presión alta y anoche por ejemplo tuve 18/10 mi presión, muchos quebrantos pasé pero voy adelante. Soy lavandera pero a veces no hay trabajo y ahí cuesta más. La Lic. Blanca que estuvo en su nacimiento es la que ayuda bastante, le compra para su uniforme y lo que necesita, le envía 100.000 guaraníes por semana para su colegio”, expresó Beatriz.

Así también, contó que su hija, la mamá del niño que obtuvo el milagro es una persona con discapacidad auditiva y que está en Asunción. “Su mamá está en Asunción trabajando, es sorda y le pagan poco, apenas 300.000 guaraníes mensual y su papá se murió cuando él tenía 3 años y le necesita a su papá. Si su papá seguía vivo, él no iba a estar así necesitando ayuda”, manifestó la abuela que pide algún tipo de ayuda para continuar luchando.