La fiscala Ariela Chaparro y el fiscal Hugo Volpe citaron a los tres de los sospechosos detenidos como implicados en el atentado ocurrido el pasado 25 de octubre en Asunción, a quienes imputó como responsables del asesinato del niño de 5 años, Gabriel Giménez.
Se trata del brasileño Bruno Enrique Ruiz de Oliveira, además de los paraguayos Rony Maximiliano Román y Diego Niz Pérez, quienes se abstuvieron de declarar ante el fiscal Volpe, quien aseguró que existen varias evidencias que involucran como responsables de realizar disparos contra la camioneta de la víctima.
Los detenidos están imputados por homicidio doloso, violación a la Ley de armas, asociación criminal y tenencia de drogas sin autorización.
"Se trata de los sicarios, efectivamente. El análisis de los circutos cerrados se pudo determinar con las características del vehículo incautado en el barrio Santa María", expresó el fiscal ante diversos medios de prensa.
De acuerdo al agente, las armas incautadas son las que se utilizaron en el atentado conforme a los análisis balísticos y las 21 vainillas servidas encontradas en el lugar. "Todas las características del hecho indican que fue un crimen por encargo", dijo Volpe.
Los investigadores indicaron que los detenidos tienen vínculos con la organización criminal paulista Primer Comando Capital (PCC).