La variedad nacional de soja, Sojapar, apunta a llegar en los dos próximos años en los campos de los producto­res paraguayos, brasileños, argentinos, uruguayos y boli­vianos, manifestó Santiago Bertoni, presidente del Ins­tituto de Biotecnología Agrí­cola (Inbio).

Este material es producto de una alianza público-privada entre el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA) y el Instituto de Biotecnolo­gía Agrícola (Inbio). Bertoni comentó que en Brasil la varie­dad está avanzando en el pro­ceso de registro. Agregó que en Uruguay comenzó el tra­bajo, mientras que en Bolivia y Argentina está próximo a ini­ciarse. Esta proyección tam­bién demandará la alianza con otros socios para promover el desarrollo del germoplasma nacional en territorios vecinos.

Bertoni señaló la importan­cia de establecer acuerdos con terceros para fortalecer el sistema de investigación de soja, de tal forma a contar con buenos materiales adapta­dos a las condiciones de cada región, con el fin de tener un éxito comercial.

Además de promover el desa­rrollo de la investigación de variedades de alta calidad y sanidad de planta debido al gen de resistencia a la roya que posee, también se pro­pone ofrecer el uso de tecno­logía a un costo bastante acce­sible, informó. El objetivo es que los materiales lleguen a los productores de la mejor manera posible.

Recordó que dentro del acuerdo, el sector privado, conforme al dinamismo que tiene, se enfoca directamente en el posicionamiento de los materiales superiores en el mercado; en cambio, el sector oficial, por tener un proceso más lento, cuenta con toda la estructura para el trabajo pri­mario de desarrollo de líneas de investigación.

El titular del Inbio dijo que, considerando el avance logrado en este corto período de tiempo, el 2018 se pro­yecta como un año alta­mente prometedor para las variedades Sojapar.