El ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano, mantuvo una reunión virtual con el ministro de Comercio Exterior de los Emiratos Árabes Unidos, Thani Al Zeyoudi, con el propósito de dar un nuevo impulso a las negociaciones del acuerdo comercial entre el Mercosur y el país árabe.
Desde Cancillería informaron que es un proceso que se encuentra en fase decisiva y que apunta a concretarse en el corto plazo. En su carácter de coordinador de las conversaciones, Paraguay asumió un rol clave dentro del bloque regional para encaminar un entendimiento que podría convertirse en una de las puertas de entrada más importantes hacia Oriente Medio y Asia para los productos sudamericanos.
La meta inmediata es alcanzar la suscripción del acuerdo durante este semestre, lo que supondría un hito estratégico tanto para Paraguay como para sus socios del Mercosur.
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Las negociaciones se iniciaron en 2024, durante la presidencia pro tempore paraguaya, y desde entonces fue registrando un avance significativo. Actualmente, se observa un progreso del 80 % en los 15 capítulos que componen la propuesta, abarcando temas como comercio de bienes, servicios, inversiones, cooperación económica y reglas de origen.
El acuerdo se perfila como una herramienta para diversificar mercados y reducir la dependencia de los destinos tradicionales de exportación, en un momento en que Paraguay y la región buscan ampliar sus vínculos con socios extrarregionales.
Para la economía paraguaya, con fuerte base agroindustrial y alimentaria, la posibilidad de ingresar con ventajas arancelarias al mercado emiratí, y por extensión a otros países del Golfo, representa un salto de competitividad.
Los Emiratos Árabes Unidos son uno de los hubs logísticos y financieros más dinámicos del mundo, con una capacidad de redistribución de mercancías hacia Asia, África y Europa. Para el Mercosur, y particularmente para Paraguay, el acceso preferencial a este mercado significa no solo aumentar exportaciones de carne, granos y alimentos procesados, sino también abrir oportunidades para servicios e inversiones en sectores estratégicos.
El Gobierno Nacional apuesta a que la concreción de este acuerdo consolide al país como un actor confiable dentro del bloque y como plataforma de diálogo con mercados de alto poder adquisitivo. El tramo final de las conversaciones se concentra en detalles sensibles que requieren consensos políticos, pero la expectativa oficial es que el proceso culmine con éxito en los próximos meses.
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