Puerto Maldonado, Perú | AFP
Tras deplorar las "hondas heridas" de la Amazonia y la violencia contra la mujer, el papa Francisco afirmó el viernes que el pulmón verde del planeta nunca ha estado tan amenazado como ahora y dijo que la trata de personas es "esclavitud", en su visita a la remota región selvática de Perú.
"Probablemente los pueblos amazónicos originarios nunca hayan estado tan amenazados en sus territorios como lo están ahora", dijo el Pontífice en un encuentro con unos 3.500 indígenas peruanos, brasileños y bolivianos en Puerto Maldonado, en su segundo día de visita a Perú.
"Vemos las hondas heridas que llevan consigo la Amazonia y sus pueblos. Y he querido venir a visitarlos y escucharlos, para (…) reafirmar una opción sincera por la defensa de la vida, defensa de la tierra y defensa de las culturas", añadió el Papa argentino en el encuentro efectuado en un coliseo deportivo.
Daños ambientales, deforestación, contaminación de ríos, pobreza, trata de personas y prostitución enfrentan los pueblos originarios, que pidieron ayuda al Papa. "Le pedimos que nos defienda", pues "los nativos somos sobrevivientes de muchas injusticias", dijo Yésica Patiachi, del pueblo Harakbut.
“ESCLAVITUD”
El Papa acudió después a un encuentro multitudinario con feligreses, en el que afirmó que la trata de personas no es más que "esclavitud" y criticó la violencia contra las mujeres. "Nos acostumbramos a utilizar el término 'trata de personas' (…), pero en realidad deberíamos hablar de esclavitud: esclavitud para el trabajo, esclavitud sexual, esclavitud para el lucro", dijo.
"Los bosques, ríos y quebradas son usados, utilizados hasta el último recurso y luego dejados baldíos e inservibles. Las personas son también tratadas con esta lógica", añadió.
El Papa dijo además que "duele constatar cómo en esta tierra, que está bajo el amparo de la Madre de Dios, tantas mujeres son tan desvaloradas, menospreciadas y expuestas a un sinfín de violencias". "No se puede 'naturalizar' la violencia hacia las mujeres (…). No nos es lícito mirar para otro lado y dejar que tantas mujeres, especialmente adolescentes, sean 'pisoteadas' en su dignidad", añadió en presencia del presidente Pedro Pablo Kuczynski.