ANDREA T. FEINBERG, JONATHAN R. SLOTKIN, ALLISON HESS Y ALISTAIR R. ERSKINE
La diabetes ha sido durante mucho tiempo una de las afecciones médicas más costosas, pero también es una de las intervenciones conductuales más fáciles de realizar y de bajo costo.
En Geisinger, nos propusimos mejorar la salud de los adultos diabéticos proporcionándoles alimentos gratuitos y nutritivos, además de un conjunto completo de servicios médicos, dietéticos, sociales y ambientales.
Este programa, nuestra "Farmacia" de Alimentos Frescos, ha tenido un impacto clínico superior al proporcionado por los medicamentos que demandan miles de millones de dólares para desarrollarse. Comenzamos el programa en un condado que tiene tasas particularmente altas de diabetes, inseguridad alimentaria, pobreza y desempleo. Las personas que tienen inseguridad alimentaria –lo que significa que no pueden obtener alimentos nutritivos de manera confiable– tienen más probabilidades de tener diabetes y de ser obesos y de tener una salud más deficiente.
Consultamos la base de datos de nuestro registro electrónico de salud para pacientes adultos en códigos postales seleccionados que tenían un diagnóstico de diabetes tipo 2 y niveles altos de hemoglobina A1c (HbA1c). Luego evaluamos a estas personas por inseguridad alimentaria con una herramienta sencilla vinculada a nuestro HME, solicitándoles que respondieran preguntas para evaluar sus niveles de inseguridad alimentaria. Hoy, los pacientes que cumplen con estos criterios y expresan interés en nuestro programa son remitidos a una consulta de inscripción donde se reúnen con su equipo de atención y reciben una "receta" para alimentos sanos y apropiados para la diabetes.