La selección paraguaya cerró su participación en las eliminatorias en forma brillante y con una gran victoria de 1-0 sobre Perú, rompiendo el maleficio de no ganar jamás en tierras incaicas.
La Albirroja tomó la iniciativa desde el minuto inicial. Perú le cedió terreno y se replegó a esperar la propuesta paraguaya, que, sin embargo, no tuvo fuerza en ataque. Ronaldo Martínez y Tony Sanabria prácticamente no recibieron pelotas, por lo que el fútbol se centró en lo que hacían los mediocampistas. Gómez no estuvo muy fino, pero fue Bobadilla el que más intentó filtrar pelotas, siendo el más claro de todos.
El otro que se puso a tono fue Ramón Sosa, quien generó la más clara, con un tremendo remate tras el despeje defensivo de los peruanos, luego de un córner. Su remate fue perfecto, pero muy al medio, permitiendo al arquero Pedro Gallese detener el remate.
En medio de ese predominio albirrojo, Perú también tuvo sus ataques, esporádicos, creando algunos desajustes defensivos. Un remate de Yotún, despejado por el debutante Orlando Gill, fue lo más peligroso.
ADÍOS AL MALEFICIO
Con los ingresos de Galarza y Kaku Romero en el segundo periodo, Alfaro buscó tener un poco más de control de la pelota.
Pero una gran jugada de Grimaldo casi le da a Perú su primer tanto. Por fortuna, su centro fue desviado levemente por Gill, evitando que Ramos conecte de cabeza la pelota.
Esto impulsó el crecimiento del cuadro incaico que comenzó a dominar las acciones y generó las mejores ocasiones de gol. Una de ellas con un cabezazo de Zambrano y otro gran remate de Tapia, que tuvo en ambas acciones una excelente respuesta de Gill para desviar la pelota al córner.
Sin embargo, si algo tiene este equipo, es que nunca da por sentado nada y generó la jugada que terminó en el golazo de Matías Galarza. El buen toque terminó en los pies de Juan Cáceres, que metió el centro perfecto para que el volante de River la pare con el pecho y meta el zurdazo colocado para desatar la alegría y el triunfo albirrojo. Un gran cierre y el Mundial lo espera.