• Berlín, Alemania. AFP.

"Las herederas", del paraguayo Marcelo Martinessi, una obra feminista en la que apenas aparecen hombres, recibió ayer el Oso de Plata a la Mejor Actriz (Ana Brun) y el Oso de Plata Alfred Bauer, en memoria del fundador del Festival Internacional de Cine de Berlín, para una película que abre nuevas perspectivas. La Berlinale celebró su edición número 68 en la capital alemana.

La cinta, que retrata a una mujer homosexual burguesa ya entrada en años que busca un nuevo comienzo, hizo así historia, puesto que se trata de la ópera prima del director y el primer filme de Paraguay en la máxima competición de la Berlinale, donde irrumpió desde el 16 de febrero pasado, con una poderosa conferencia de prensa y numerosas reseñas favorables.

"Vivimos en una sociedad conservadora y si estamos abriendo las mentes y abriendo puertas en Paraguay, entonces este filme aportará mucho", dijo Martinessi, acompañado por sus protagonistas Ana Brun, Margarita Irún y Ana Ivanova, así como del productor paraguayo Sebastián Peña Escobar.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

La cinta explora el universo femenino a través de Chela (Ana Brun), que vive con su pareja Chiqui, con quien ya apenas comparte nada. Cuando Chiqui es encarcelada debido a las deudas económicas de ambas, Chela lo vivirá como una liberación que le permitirá reencontrarse a sí misma.

Emocionada, Ana Brun, abogada de profesión y que hasta ahora había actuado esencialmente en el teatro, dedicó el premio "a todas las mujeres en (su) país que luchan". La histórica doble premiación coincidió con la celebración del Día de la Mujer Paraguaya, que cada 24 de febrero se conmemora en alusión a la Primera Asamblea de Mujeres Americanas realizada en 1867, en la ciudad de Asunción, que decidieron reunir sus joyas para ayudar en la causa de la Guerra de la Triple Alianza y son conocidas como "Las Residentas".

Teddy y crítica

El viernes pasado, "Las herederas" empezó a cosechar sus primeros premios, con tres galardones otorgados por jurados independientes. Primeramente mereció el de la crítica internacional, el Fipresci (Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica), a la mejor película de la competencia, entre 19 candidatas. Luego, otro gremio de críticos independientes le entregó The Giuseppe Becce Prize a la mejor película, en su décima edición.

Finalmente, la gala número 32 del Teddy Award, orientada a los filmes con especial sensibilidad para la comunidad LGTB (lesbianas, gais, bisexuales y trans), tuvo como finalista a "Las herederas", pero el trofeo fue para la brasileña "Tinta Bruta". No obstante, la película paraguaya logró el premio Teddy del público ("Teddy Mannschaft Readers' Award"), otorgado por un jurado de lectores de la revista Mannschaft.

La película

"Siempre me molestó tener a la mujer como objeto en el cine: la secretaria, la que pasa, a la que se mira… Para la película pensé ¿por qué no aprovechamos y usamos a los hombres como objeto? Me llamó la atención de que muchos hombres del 'crew' se sentían incómodos, me preguntaban '¿por qué haces esto?'. Me digo: Si esta gente con formación, que ha visto mucho cine, se siente así de violentada, ¡lo que debe ser la historia del cine para las mujeres! ¡Qué peso!", expresó Martinessi, en una entrevista para AFP.

El cineasta paraguayo ganó en el 2017 el premio al mejor cortometraje en otro prestigioso festival clase A, el de Venecia, con "La voz perdida", que aborda la masacre de Curuguaty. Con "Las herederas" llegó por quinta ocasión a la Berlinale, ya que en el 2009 estrenó su corto "Karai Norte" en Berlinale Shorts (2009), así como "Calle Última" en Generación (2011); también fue parte del Talents (2012) y en DocStation (2013). Es autor de otros cortos como "Partida" (2008) y "El baldío" (2012); los documentales "Los paraguayos" (2007), "Paraguay según Agustín Barrios" (2007) y "Diario Guaraní" (2016); así como fue el primer director de la TV Pública de Paraguay, hasta el 2012.

"Las herederas" es una coproducción de seis países, entre Paraguay, Alemania, Uruguay, Noruega, Brasil y Francia. Costó entre 600 a 700 mil dólares, a partir de diversos fondos, incluyendo del Programa Ibermedia. Tras cuatro años de desarrollar el guión, la producción desarrolló su rodaje en Asunción y alrededores durante cuarenta días, en el 2017.

Dejanos tu comentario