Cerro Porteño ratificó que nadie puede quebrantar la Nueva Olla y con sobrados merecimientos, venció 2-0 a Sol de América, recuperando así algo del terreno perdido en las dos primeras jornadas. El Ciclón mostró argumentos importantes y ya se ve algo de la mano de Luis Zubeldía.

El DT argentino paró el mismo once que vino de empatar hace una fecha ante el 3 de Febrero. El equipo había jugado bien, generando muchas ocasiones, pero su gran déficit había sido al definición, por lo que se creía que podría haber variantes, tanto de hombres como de esquema.

Como ante el “3”, el Ciclón fue amplio dominador en casi todo partido. La línea de cuatro en el medio respondió esta vez y todo gracias a que Rodrigo Rojas estuvo participativo, combativo y empujando como de costumbre. Las llegadas del local dependieron mucho en principio del juvenil Alan Rodríguez, quien fue lo más desequilibrante del primer tiempo, aunque su falta de experiencia le costó mucho, pues no supo dosificar su energía y terminó ahogado muy rápido.

Sol de América fue inteligente en principio y le complicó enormemente a Cerro en los contragolpes, preferentemente por derecha, por donde Martín Giménez hizo estragos. Lo volvió loco en la etapa inicial a Santiago Arzamendia, pero su déficit fue no decidir bien cuando ganaba la raya de fondo.

El equipo de Zubeldía tuvo dos clarísimas para notar en el primer tiempo. Un remate del chico Rodríguez pasó a centímetros del palo derecho de Escobar y un remate de Churín, dentro del área, fue interceptado por Acuña.

Antes de que los equipos se acomoden para la complementaria, Cerro encontró el ansiado festejo ante su gente, que le daría más tranquilidad y serenidad para manejar el trámite. Santiago Arzamendia ganó por guapo por izquierda, dejó a varios hombres en el camino y desde un ángulo cerradísimo, le rompió el techo del arco al portero solense.

El gol fue un mazazo para la visita, al que se le había cambiado el libreto, pues la idea era esperar más antes que buscar. Y con la desventaja, tenía la obligación de empatar como mínimo.

A los 56 minutos, cerró ya cerró la victoria a su favor. Óscar Ruiz aprovechó los grandes espacios que dejó Sol y con gran exquisitez, puso el 2-0, que fue el que liquidó totalmente al equipo de Héctor Marecos.

A partir de ahí, el Ciclón se dedicó a controlar el balón y sin arriesgar demasiado, buscar el tercero. Al Danzarín se le fueron las ganas. Giménez, lo mejor del primer tiempo, se borró totalmente, Pablo Zeballos tuvo un protagonismo intrascendente y el ingreso de “Pinti” Álvarez tampoco le inyectó frescura ni sorpresa a la visita.

Estadio: La Nueva Olla

Árbitro: Eber Aquino

Asistentes: Roberto Cañete y Luis Onieva

Cuarto árbitro: Juan Gabriel Benítez

Goles: 46′ Santiago Arzamendia, 56′ Óscar Ruiz (CP)

Amonestados: Churín, Oviedo, R. Rojas, J. Rojas (CP); Giménez, Acuña, Salcedo y Franco (SA)

Recaudación: G. 297.395.000 por 9.177 pagantes; en total ingresaron 17.070 espectadores.

Alineaciones:

Cerro Porteño: Antony Silva; Raúl Cáceres, Marcos Cáceres, Ignacio Pallas y Santiago Arzamendia (Juan Escobar); Alan Rodríguez (39′ Jorge Rojas), Rodrigo Rojas, Juan Aguilar y Óscar Ruiz; Alfio Oviedo (74′ Marcelo Palau) y Diego Churín.

Sol de América: Rubén Escobar; Gustavo Velázquez, Federico Acuña, Iván Villalba y Diego Vera; Tomás Rojas (60′ Ernesto Álvarez), Aldo Vera, José Domingo Salcedo y Martín Giménez; Rodrigo Ruiz Díaz (59′ Willian Palacios) y Pablo Zeballos (75′ Richard Franco).