La propuesta de cambiar de fisonomía la Plaza de la Democracia para reverdecerla y eventualmente volver al antiguo diseño con fuentes de agua, ha generado un debate en la Municipalidad de Asunción y también entre los ciudadanos capitalinos.
La Nación se hizo eco ayer de la iniciativa aprobada por la Junta Municipal, en la que se pide a la Intendencia un estudio sobre un eventual rediseño de la plaza. La idea la pusimos en las redes sociales y si bien una mayoría consideró que sería interesante que de nuevo tenga más verde y una fuente, otros indicaron que lo más oportuno será destinar dinero para la solución de otros problemas, como el del estado de las calles.
En la fang page de Facebook de la Nación, José Mendieta indicó que estaba de acuerdo, porque lo que se hizo durante la administración de Carlos Filizzola en la Intendencia (1991-1995) destruyó lo que había. Stephan Schultheiss consideró "interesante" la propuesta pero advirtió que si no se cuidara como se debe, es mejor dejar así como está. "La Municipalidad y los ciudadanos actualmente no somos siquiera capaces de mantener en forma las pocas plazas que tenemos, entonces de qué nos sirve que se gaste un montón de plata en remodelar esta plaza", comentó.
Víctor Chávez indicó que "si le van a devolver la vida y el verde que tenía, sería buena idea", mientras que Éver Colmán expresó que hay muchas otras cosas en que gastar. "Desde mi punto de vista la plaza está bien así", expresó para luego pedir solución a los baches en varias avenidas. Daniel Fernández Franco se preguntó ¿para qué?, y añadió su comentario diciendo: "arreglen las calles, hay baches por todos lados".
Este espacio público formaba parte del conjunto de las cuatro plazas naturales denominada "De los Héroes", pero que con la transformación de una de ellas ("Plaza de la Democracia") pasaron a denominarse "Plaza de los Héroes" (donde está el Panteón Nacional), "Plaza Juan E. O'Leary" y "Plaza de la Libertad". Fue uno de los sitios más emblemáticos de Asunción y principal atractivo para los turistas constituía la plaza donde sobresalía una fuente lumínica y sonora que estaba frente al Hotel Guaraní y al Banco Nacional de Fomento.