• Por Julio Ibarrola
  • Ex diputado

La nueva realidad campesina del país que se vive desde hace tiempo, es desconocido por los principales actores que tienen la responsabilidad de conducir y dar la respuesta adecuada. En este caso concreto el Indert, por su ignorancia, inconducta o complicidad. Producen hechos como el caso llamado Guahory.

Se trata de un lugar de trabajo desde 1989. Los paraguayos beneficiados primeros y muchos no soportaron la falta de caminos. Necesitaban más apoyo del IBR, la necesidad de una escuela y un lugar de atención a la salud, les ha obligado a abandonar el lugar y vender las famosas derecheras.

Y quiénes los compraron? Primero los migrantes y sus hijos, la mayoría nacieron en el país. Otros compatriotas se quedaron en el lugar y soportaron la realidad que les obligaba a una lucha casi inhumana. Pero decidieron trabajar y hacer producir la tierra.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Ese fue el inicio de Guahory, así nació una colonia de gran producción granera. Una convivencia de hermandad campesina, productiva, donde la realidad del trabajo les integró. No había migrantes ni paraguayos, solo productores. Gracias a esa convivencia nuestros hermanos campesinos aprendieron la lección de cómo sembrar la soja, trigo, maíz, girasol que hoy en su totalidad son sojeros o graneros. Y muchos de ellos con maquinarias agrícolas modernísimas.

Pero un día llegó la política, la corriente ideológica, la seudoizquierda con todas sus fibras de mentira y lanzó sus dardos de odio, de rencor xenofóbica, dividiéndoles hasta llegar a un enfrentamiento de ocupación de las tierras de quienes ayer aprendieron la buena producción granera.

Los compatriotas azuzados por conocidos delincuentes como los Wagner, López Perito, Esperanza Martínez y otros además de Monseñor Gavilán robaron cerca de 70 ganados. Ametrallaron casas y dejaron sin luz durante cuatro meses a uno que no abandonó su tierra.

El Indert, ignorante y cobarde, navega en distintas aguas turbias sin nunca definir y finalmente como un milagro el Gobierno adoptó como una medida salvadora y adquirió 1.500 hectáreas para llevar a un buen puerto la problemática creada.

El gobierno de Horacio Cartes entendió que se tenía que adquirir esa cantidad de tierras. La problemática creada en Guahory es producto de la falta de una visión mucho más profunda porque no podemos vivir en un ambiente de confrontación, si queremos desarrollo no solo de la producción agrícola, sino que todas las instituciones funcionen.

La acción positiva de este Gobierno que busca por todos los medios dotar de herramientas válidas como camino, asistencia técnica, escuelas y colegios hasta llegar a la universidad, es el más eficiente camino para construir la Patria soñada.

Déjanos tus comentarios en Voiz