Por Christian Pérez
El Gumarelo tiene algunos sellos característicos del nuevo entrenador, pero es mucho más equilibrado y menos posesivo de lo que normalmente se acostumbra ver de los equipos del "Míster".
En un pestañeo al inicio del juego, los de Tuyucuá ya estaban en ventaja. Antonio Bareiro ajustó el resorte que tiene y clavó a un costado de Medina un gran centro de Vergara. El "Demonio" volvió aparecer a los 24' para limpiar a todo el fondo auriazul y servir al medio, donde estaba el joven y efectivo artillero Jonathan Valiente.
Desde ahí la visita reguló el ritmo y cedió el protagonismo al local. Diego Gavilán cambió de esquema rápidamente y con el ingreso de "Totito" Villamayor, tuvo más verticalidad, aunque le faltó peso en ofensiva, donde Verdún, solitario, poco pudo hacer ante la experiencia de Alcaraz y Cardozo.
En la complementaria, Gavilán volvió a retocar esquemas del medio para arriba y jugó prácticamente si referente de área. López fungió de "9" falso tras la salida de Verdún. Con sus imprecisiones, "Totito" fue lo más peligroso de Capiatá. Estrelló un tiro libre al travesaño y obligó una gran intervención de Muñoz.
El descuento local llegó rápido en la complementaria, por intermedio de Borjas, pero el marcador se congeló ahí, a pesar de las llegadas desesperadas de Capiatá y los contragolpes mal ejecutados por Libertad.
El Gumarelo comienza firme y con rótulo de serio candidato, mientras que el Auriazul demostró que incluso con equipo alternativo dará pelea y se concentra en el duelo copero del miércoles.