• Por PABLO PEDRERO
• Periodista del Grupo La Nación.

Impulsado por la pasión por el fútbol de su padre, Pedro Báez llegó desde Santaní a la Capital con solo 10 años y se fue forjando camino a fuerza de trabajo hasta llegar a las selecciones Sub 18 y Sub 20 de la Albirroja. Actualmente es jugador de Cerro Porteño y se incorpora al plantel principal para el torneo Apertura. En un mano a mano con Pablo Pedrero desgranó su carrera.

"No teníamos lugar, jugábamos en cualquier lado, no importaba donde. Usábamos zapatillas para armar los arcos. Siempre fui 9, nunca cambié, salvo cuando estaba en colegiales, donde jugué de delantero por izquierda. Por suerte, siempre me elegían segundo o tercero"

"Yo inicié en Santaní, practiqué desde los 5-6 años en la escuela 8 de Diciembre. Mi papá era un apasionado del fútbol y yo también, entrenando me empezó a encantar, y gracias a eso pude perseguir mi sueño que era jugar a nivel profesional".

"A los 10 años casi dejé el fútbol, estaba buscando un club en el que pueda jugar y mientras buscaba un equipo dejé la práctica por 6 meses".

"Luego, por problemas tuve que venir a Asunción a los 10 años. Tardé en volver a practicar hasta que fui a la escuela de fútbol Primero de Mayo de Ñemby, tenía 12 o 13 años. Terminé la escuela de fútbol y jugué 5 meses en Colegiales, en la Sub 15, y de ahí fui a Cerro de Franco, donde estuve 2 o 3 meses. Contra Cerro, las dos veces que jugamos ese torneo le marqué dos goles, impresioné bien y me llamaron. Fui a Cerro, estuve un año y medio y de ahí me llamaron a la selección Sub 20".

"Como me fue bien en la selección estando en la Sub 18 de Cerro, Kike Landaida me llamó a la primera del Ciclón. Ahí entrené un mes más o menos, era el segundo Sub 20, porque estaba Sergio Díaz, y él se fue expulsado en el clásico, me dijeron que iba a jugar, no sabes la emoción que tenía. Debuté en primera ante Sol de América"

"Llegaba a la Sub 20 de la selección, yo no pensaba que iba a estar. Estaba en la Sub 18 y Morínigo dio la lista y yo estaba ahí. Empecé como suplente, pero trabajando me fui ganando el puesto de titular. Kike Landaida seguía en la selección y de ahí fue a Cerro, ni bien llegó me subió a primera para ir preparándome para el nivel profesional".

"Yo creo que la reglamentación Sub 19 es muy importante, al rozar con gente más grande y experimentada vos crecés en experiencia".

"Yo viajé solo, fui al Real Salt Lake de EEUU, con la reserva jugué 3 partidos y marqué dos goles y luego tuve algunos minutos en primera. Yo era muy rova'atã (cara dura) y gracias a eso me gané la oportunidad de jugar en primera".

"Ahora me dijeron la gente de Cerro que al volver tengo que acoplarme al plantel de primera, gracias a los dos goles en los dos partidos que jugué en el sudamericano".

"Mi familia es lo más importante para mí. Yo soy un joven muy tranquilo, no me gusta farrear y eso hizo que toda mi familia me apoye mucho. Es un sostén para mí".

"Gustavo Morínigo y 'Matador' Núñez, con quien aprendí mucho cómo posicionarme en la cancha, me dio varios detalles, lo mismo que Morínigo".