El presidente estadounidense Barack Obama cierra el libro de su mandato este martes con un discurso de despedida en Chicago, en el que tratará de levantar a sus seguidores golpeados por la victoria de Donald Trump.
El último viaje de Obama en el avión Air Force One será un peregrinaje a la ciudad que lo adoptó, desde donde se dirigirá a una multitud con entradas agotadas no muy lejos de donde aceptó la presidencia hace ocho años.
Los más fanáticos, muchos afroamericanos, desafiaron el gélido invierno de Chicago para recoger entradas gratuitas que ahora se venden por más de 1.000 dólares en el sitio Craigslist.
La primera dama Michelle Obama, el vicepresidente Joe Biden y su esposa Jill estarán presentes en este viaje de adiós.
La travesía nacional de Obama será un viaje sentimental por el camino de la memoria, si no fuera por la conmoción por la tumultuosa entrega de poder a Trump.
El mensaje
En la página oficial de la Casa Blanca, el presidente Barack Obama dejó un mensaje bajo el título "Mi despedida". En el escrito alude a la tradición de realizar un discurso de despedida que fuera iniciado por George Washington en 1796. Todos los presidentes estadounidenses -durante 220 años- siguieron ese ejemplo, remarcó.
"El martes, 10 de enero, iré a casa, a Chicago para decirles mi agradecido adiós, aunque no puedan estar allí en persona", destacó.
Mencionó que utilizará ese encuentro con la gente como una oportunidad para dar gracias por el "viaje increíble" y "para celebrar las maneras que has cambiado este país para mejor".
Obama señaló que desde 2009, se han enfrentado retos que los han vuelto más fuerte. "Nunca hemos dejado de lado una creencia que nos ha guiado desde nuestra fundación, nuestra convicción de que, juntos, podemos cambiar este país para mejor".