El Poder Ejecutivo promulgó ayer el Presupuesto General de la Nación (PGN) 2017, cuya estructura y montos corresponde a los mismos de ingresos y gastos que estuvieron vigentes el año pasado. Esto, en razón de que el documento sancionado por el Congreso Nacional en diciembre pasado, fue vetado totalmente por el presidente de la República, Horacio Cartes, en decisión presentada ante la Comisión Permanente del Parlamento el 26 de diciembre.
"Ante la necesidad de establecer normas y procedimientos presupuestarios y precautelando el funcionamiento del Estado, el cumplimiento de sus obligaciones, la atención de los gastos prioritarios en concepto de salarios, pensiones, jubilaciones y otros gastos misionales según la naturaleza de cada Organismo y Entidad del Estado (OEE), el Poder Ejecutivo, por Decreto Nº 6657 de la fecha, establece que para la ejecución del Presupuesto General de la Nación para el ejercicio fiscal 2017, seguirá vigente el Presupuesto General de la Nación del 2016, con sus modificaciones", argumenta el Poder Ejecutivo.
El instrumento autoriza el pago de la deuda flotante con cargo a los saldos disponibles en las cuentas bancarias del Tesoro Público y de los OEE, que deberá ser pagada a más tardar el último día del mes de febrero del ejercicio fiscal vigente.
Cabe mencionar que el plan de gastos remitido el año pasado por el Poder Ejecutivo (PE) ascendió a 66,383 billones de guaraníes (unos 11.564 millones de dólares al tipo de cambio actual). El PGN 2016 fue inflado en 0,2%, considerando que el original era de 66,221 billones de guaraníes (cerca 11.320 millones de dólares).
El Ministerio de Hacienda realizó una revisión en enero pasado de la proyección de los ingresos tributarios. En ese sentido, lo redujo en aproximadamente 300 millones de dólares, considerando que de la estimación inicial presentada en setiembre del 2015 en el proyecto de Presupuesto General de la Nación (PGN) para el 2016, se contemplaba un crecimiento del 9,5% de recaudación con relación a ese año fiscal.
Conforme a lo que fue aprobado en el PGN 2016 y que regirá durante el 2017, de los 650 millones de dólares del volumen de bonos que el Ministerio de Hacienda estaba autorizado a emitir a nivel local e internacional en el presente año, unos 300 millones de dólares eran destinados para pagar deudas y el resto, al financiamiento de obras de infraestructura.