El padre de una niña de 12 años, quien quedó con muerte encefálica tras un accidente en motocicleta con su madre, donó los riñones de la menor, beneficiando a dos personas. El corazón no pudo ser trasplantado a la niña del Pediátrico –que aguarda con urgencia el órgano– porque no coincidieron los estudios de histocompatibilidad.
El trágico suceso ocurrió en la ciudad de Pedro Juan Caballero. La pequeña iba como acompañante en la motocicleta conducida por su mamá embarazada. La madre murió al instante, pero su hija fue derivada al Hospital de Trauma, donde pese al esfuerzo de los médicos no se le pudo salvar la vida.
La niña de 12 años fue trasladada desde la capital del Amambay hasta el hospital de Trauma "Dr. Juan Manuel Gianni" en estado grave, donde se procuró salvarle la vida, sin éxito. Finalmente le certificaron "muerte encefálica".
Tras recibir esta noticia de parte de los médicos, el padre tomó la decisión de donar los órganos de su hija, abriendo una ventana de esperanza para dos pacientes que aguardaban un trasplante renal para seguir viviendo.
"A pesar de tan terribles pérdidas, tuvo la fortaleza de decir sí a la donación y brindar la oportunidad a otras personas de seguir viviendo", señaló el Dr. Hugo Espinoza, director del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT).
El profesional comentó que quedó conmovido con la actitud del papá. "Es muy joven y, con todo el dolor que implica haber perdido a su familia, tuvo la grandeza de hacer la donación", resaltó.
OPERACIÓN
El pasado lunes 2 de enero se realizó la ablación de los órganos de la niña. Ayer se concretaron los trasplantes de riñones, que fueron para un paciente del Hospital de Clínicas y para otro del Instituto de Previsión Social (IPS).
"El tamaño del corazón y el grupo sanguíneo no coincidían para realizar el trasplante cardíaco a la niña internada en el Pediátrico que aguarda un nuevo corazón", lamentó el doctor Hugo Espinoza.