Raphael Minder
MADRID.
La Corte Europea de Justicia, la máxima instancia judicial en la Unión Europea, decretó el 21 de diciembre que los clientes de algunos bancos españoles podían reclamar miles de millones de euros, pues las instituciones de crédito no les transfirieron los ahorros por la reducción de las tasas de interés en hipotecas de tasa variable. Esto provocó que se desplomaran las acciones de los principales bancos del país.
El fallo se centró en la aplicación de la "cláusula de piso" en los contratos de hipotecas, a raíz de la crisis financiera global. Esos acuerdos establecían que, en las hipotecas de tasa variable, la tasa de interés siempre se mantendría por encima de determinado nivel, sin importar cuánto cayeran las tasas de referencia del banco central.
Los establecimientos de crédito empezaron a aplicar esa cláusula en el 2009, después de que la crisis financiera global hiciera que los bancos centrales de todo el mundo recortaran las tasas de interés. Eso ayudó a preservar los márgenes de ganancia de los bancos, pero estos no le pasaron las rebajas de las tasas de interés a los clientes más allá de determinado nivel.
En el 2013, la Suprema Corte de España determinó que esos convenios eran ilegales, debido en parte a que los bancos no se los explicaron debidamente a los clientes. Sin embargo, la corte no penalizó a los prestamistas de forma retroactiva.
Pero la Corte Europea de Justicia confirmó el 21 de diciembre que los arreglos eran ilegales y fue más allá, estableciendo que los clientes podían reclamar el reembolso de todos los pagos hechos a una tasa de interés considerada demasiado alta, sin que prescriba esa posibilidad.
La decisión, que ya no admite apelación, significa que los bancos de España podrían verse obligados a devolver 4.500 millones de euros a sus clientes, según la oficina de consultoría financiera española Afi.
El fallo, que cayó de sorpresa pues fue en contra de la opinión emitida este mismo año por el principal asesor de la corte, puso a temblar a las acciones de los bancos, algunas de las cuales perdieron hasta 10 por ciento.