Libertad comenzó mal el año. Muy flojo, no tuvo reacción el torneo Apertura. El entrenador Eduardo Rivera no pudo congeniar un equipo regular. La dirigencia le dio la "libertad" absoluta. Así llegaron varios jugadores a pedido de Rivera. Duró doce partidos, pero pudo irse antes. Roberto "Tiburon" Torres renunció a Cerro Porteño, con el que había sido campeón del Apertura 2015. Estaba desocupado. Libertad lo contrató para los últimos diez partidos, que fueron decisivos para la consagración. Arremetiendo de atrás, Libertad alcanzó el cetro en la última fecha con un punto sobre Olimpia en la última fecha. Con Roberto Torres se consiguieron 25 puntos de 30 posibles. Un título impresionante.

En el Clausura, Guaraní había arrancado más firme con Francisco "Chiqui" Arce, pero a este lo precisó la selección mayor paraguaya. Antes de ir a la Albirroja, el equipo aurinegro había recibido una paliza de parte de Sol de América (3-0). Faltaba mucho. Los 16 partidos restantes le encargaron al argentino Daniel Garnero, quien volvió a Paraguay tras un primer paso irregular por Sol de América. Con Garnero, Guaraní arrasó. La producción fue impresionante, más todavía cuando Olimpia estaba al acecho y no aflojaba entre solo dos competidores por el premio mayor. Con 38 puntos sobre 48 posibles, el cetro recayó anticipadamente a falta de una fecha en carpas legendarias.

Guaraní de Garnero fue demasiado efectivo, incluso logró levantar milagrosamente en varios partido. Uno de ellos fue increíble frente a Sol de América, que tras ir abajo 1-3, terminó venciendo 4-3.