Desde un punto de vista evolutivo, la reproducción sexual podría ser considerada como un gasto importante de tiempo y energía. Esto en comparación a otros sistemas como la clonación. Sin embargo, ofrece ventajas como la variedad genética que permite enfrentar mejor las enfermedades, indicó un estudio.
"Una de las interrogantes más antiguas de la biología evolutiva es por qué existe el sexo". Así lo dijo Stuart Auld, un biólogo de la Universidad de Stirling en Escocia.
Según las leyes de la selección natural de Darwin, la complejidad de la vía sexual, tiene que ofrecer mayores ventajas. Aunque éstas no sean evidentes a simple vista.
La reproducción sexuada genera variación genética. Esto aumenta las posibilidades de que la descendencia tenga la genética para enfrenarse a un ambiente en constante evolución.
En contraste los clones no varían. Si el ambiente cambia, la madre del clon va a producir una copia que no va a contar con los genes que necesita para prosperar.
Costos y beneficios
"Pero el sexo necesita ser dos veces más eficaz que la clonación para compensar los costos", dijo Auld a la AFP.
"Para que el sexo resulte favorecido en la selección natural, la madre tiene que producir dos veces más crías o generar descendencia que sea dos veces mejor", afirmó.
Pero demostrar esta teoría en un experimento que compare los costos y los beneficios es complicado.
Para resolver el problema, los científicos decidieron utilizar como sujeto a la pulga de mar. Esta criatura puede reproducirse de las dos formas.
"Al comparar las hijas de una misma madre producidas por clonación de las originarias de una reproducción sexuada, encontramos que las generadas mediante el sexo tenían descendencia que se enfermaba menos", aseguró Auld.
Cambios genéticos
La constante necesidad de evitar las enfermedades, explica por qué el sexo sigue existiendo pese a los altos "costos" que genera, explicó.
Los parásitos y sus huéspedes están en una constante guerra de tira y afloja en la que evolucionan y se adaptan el uno al otro. Uno ataca el sistema inmune y el otro lo reconstruye.
La clonación brinda pocas opciones de cambios genéticos en el huésped.
La reproducción sexual aporta nuevas variaciones genéticas procedentes de la mezcla en cada generación. Ofrece más oportunidades de responder a los patógenos.
Estos descubrimientos fueron publicados por la revista británica Proceedings of the Royal Society of London B.