Los manifestantes no solamente lanzaron duros epítetos en contra del jefe de Estado y su entorno político, sino que también exhibieron un gran cartel dirigido a la senadora liberal Blanca Fonseca, a quien la calificaron de "prostituta" y que sería violada si vota a favor de la enmienda constitucional.

La parlamentaria había declarado públicamente que votaría a favor de la iniciativa que habilita la reelección del presidente de la República y también de los gobernadores. Según anticiparon los proyectistas, una de las innovaciones en el contenido de la iniciativa es precisamente la introducción de la posibilidad de un segundo período de los jefes departamentales.

En consecuencia, la legisladora anunció que presentará una querella contra el titular del PLRA, Efraín Alegre, a quien responsabiliza por permitir la abierta amenaza de un hecho reprochable contra la autonomía sexual.

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Dicha amenaza fue ostensible ayer de tarde, en el marco de la manifestación de los autodenominados "defensores de la democracia", cuyo mitin político tuvo lugar en la Plaza de la Democracia, en Asunción.

"En este caso el responsable directo es el organizador, el presidente del Partido Liberal (Alegre), y yo le voy a demandar por haber permitido este tipo de alusión a una mujer, principalmente. Voy a meterle una querella", dijo Fonseca. "Estoy hablando con mi abogado. Es una vergüenza. Pasa que no tiene nada con qué acusarnos y ataca a la parte más débil, a las mujeres. Que se vea él. Es lamentable", agregó.

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