La proyección del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del año 2016 presenta una tasa de 4,0%, superior al 3,5% que fuera señalada en julio de 2016.
Los ajustes al alza del sector industrial, de las construcciones, de las binacionales y del comercio, han sido clave en esta revisión de crecimiento, según el informe emitido por la entidad bancaria.
Se destaca que el ajuste proviene principalmente de sectores no primarios, dando como resultado un desempeño más diversificado del PIB respecto a la proyección anterior.
Conforme a las últimas informaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), para la campaña agrícola 2015-2016, la producción de soja arroja un menor crecimiento en término de su producción, en relación a la prevista en julio pasado, lo cual induce a una corrección a la baja en el crecimiento de la agricultura de 3,1% a 2,5%.
El sector ganadero, mantiene una tasa positiva de crecimiento y cerraría el año en torno a 5%.
En expansión
El sector secundario sigue con su ritmo de expansión, al observar una tasa del 9,1%, superior a la revisión de julio pasado que fuera del 6,4%. Esta revisión al alza es justificada por crecimientos en la producción manufacturera, construcción y electricidad y agua. Estos dos últimos segmentos, explican el 80% de dicho aumento, especialmente por el gran dinamismo que registran las binacionales, en las que se verifican niveles records de producción de energía eléctrica.
Por el lado del gasto, la demanda interna crecerá 2,5%, tasa inferior a la prevista en la revisión previa (3,1%). Dicha tasa está justificada por la caída en el consumo público (-2%), cuyo desempeño está asociado a la reducción de los gastos corrientes del gobierno, con la finalidad de generar mayor espacio para las inversiones públicas en el marco de cumplimiento de la Ley de Responsabilidad Fiscal.
La Formación Bruta de Capital Fijo (FBKF) aumentará en torno al 5%, superior a la proyección anterior (4,1%), situación explicada por la gran dinámica que experimenta el sector de la construcción.
La demanda externa presenta un mejor panorama, con un ajuste al alza, debido a que se observan mejoras en las exportaciones netas comparadas con el anterior informe de proyección.