La Secretaría Nacional de Vivienda y el Hábitat esta en el ojo la tormenta tras la revelación de supuestos costos inflados de materiales que la institución iba a adquirir en el plan de refacción y reparación del edificio donde funciona el ente. En el documento publicado, macetas y plantas por el costo G. 450 mil cada unidad figuran en el presupuesto, mientras que el precio de mercado es sumamente inferior. Vale la pena aclarar que la Senavitat no pagó en ningún momento por dichos materiales ya que no entro en ejecución el contrato.

La máxima responsable a cargo de esta cartera, Soledad Nuñez, explicó a La Nación Digital que en la licitación se presentaron varias ofertas, se optó por la más baja, apelando a la austeridad. Aclaró también que el contrato aún no entró en ejecución y que ella ya realizó un llamado de atención a la Unidad de Costos, que es realmente la responsable del control de los precios.

Postergación o cambio de rubro

"Cuando esto saltó yo solicité un informe de manera inmediata. En la Unidad Técnica del Gabinete me explicaron que esta fue la oferta más baja que presentó la empresa. Desde el Gabinete decidieron extender el plazo antes de la ejecución de la misma, o bien, plantear un cambio de rubro una vez que se ejecute el contrato, que luego eso amerita una evaluación de rubro por rubro y en caso de que no corresponda, eso no se ejecuta", expresó la alta funcionaria.

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Según la ministra, las alternativas eran dejar con 4 meses de postergación al contrato o adjudicar otra oferta con precios muchos más elevados. "En ese caso el gasto iba ser mucho más elevado para el Estado", replicó. "Entonces, se tomó la decisión técnica sobre el cambio de rubro a la hora de ejecutar el contrato para que no se retrase el proceso de reparación del edificio", justificó.

Control aleatorio, pero no periódico

El contrato en cuestión lleva el sello y la firma de la Secretaria de Estado. Al consultarle si analizó los altos precios detallados al momento de plasmar su nombre y apellido, mencionó que eso es imposible. "Yo no me pongo a corroborar todos los ítems uno a uno. Me encantaría poder hacerlo, es más, suelo hacer controles aleatorios, pero los costos yo no los tengo en la cabeza. No tengo la capacidad para verificar todos los precios. Esa es una atribución de la Unidad de Costos y la Operativa, a quienes ya les llamé la atención", finalizó.

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