Santiago, Chile. AFP
Bolivia firmó un sorpresivo y valioso empate sin goles en su visita a Chile y encendió las alarmas en la tierra del campeón de América que se aleja de los líderes de la clasificatoria sudamericana rumbo al Mundial Rusia-2018.
Un planteamiento impecable del estratega argentino Ángel Hoyos, una noche soñada del arquero Carlos Lampe y la incapacidad de Chile para darle profundidad a su juego fueron suficientes para darle a Bolivia un dulce y festejado empate que lo devuelve a la pelea.
Más allá del punto que es insuficiente para sacar a Bolivia de la octava posición, la Verde demostró que salió del infierno y vuelve a soñar con hacerse fuerte en la altura de La Paz como en la fecha pasada ante Perú y complicar con su juego defensivo cuando el rival tiene más argumentos futbolísticos.
Enfrente, Chile confirmó que en la clasificatoria sudamericana no cuentan las coronas de campeón de América y se mantiene en una incómoda séptima posición que deja cuesta arriba la obtención de un boleto rumbo al Mundial ruso.
Chile mostró su habitual planteo ofensivo desde el primer minuto con llegadas en bloque al área defendida por Lampe, que a los 12 minutos voló para sacar por encima del travesaño un potente cabezazo de Eduardo Vargas.
A partir de allí arrancaron los peores minutos de Bolivia que soportó siete tiros de esquina de Chile en 20 minutos de partido en los que los dirigidos por Juan Antonio Pizzi tuvieron la pelota y el control del duelo, pero sin lograr profundidad.
El empate deja a Chile con apenas un punto en una doble fecha clasificatoria que arrancó con derrota ante Paraguay, Bolivia sumó cuatro puntos con victoria ante Perú y el punto obtenido en Santiago.