Tras el aterrizaje del Air Force One, el avión presidencial que transportaba al presidente de EEUU, Barack Obama, en la pista del aeropuerto de Hangzhou, donde se celebra la cumbre del G20, en China, no se desplegó la alfombra roja para recibir al mandatario al descender del avión y un alto funcionario de la Casa Blanca mantuvo un tenso intercambio de palabras con un miembro de la seguridad china, informó la agencia AFP.
Además, un agente chino impidió a la prensa estadounidense que esperara bajo una de las alas del Boeing 747 a que bajara el presidente. Una responsable de la Casa Blanca intervino entonces indicando al agente que se trataba de un avión estadounidense y del presidente de EEUU. El agente chino replicó en inglés: "¡Este es nuestro país, es nuestro aeropuerto!".
El agente también intentó impedir a la consejera para la Seguridad Nacional, Susan Rice, que se acercara al presidente. Se precipitó sobre ella cuando ésta quiso pasar bajo el cordón que delimitaba el espacio reservado para el pasaje de Obama. El mandatario estadounidense subrayó ayer las diferencias entre su país y China en materia de libertad de prensa, también reconoció que la enorme logística que requiere la delegación estadounidense puede en ocasiones ser fuente de tensiones para el país anfitrión.
Destacó ayer las diferencias entre China y EEUU respecto a los derechos humanos y la libertad de prensa, en respuesta al incidente. "Es importante que la prensa tenga acceso al trabajo que estamos haciendo, que tenga la posibilidad de hacer preguntas", declaró Obama. "No dejamos atrás nuestros valores y nuestros ideales cuando viajamos", añadió, asegurando que no dudaba en hablar de temas que no complacen a sus anfitriones chinos. "Cuando abordo temas como el de los derechos humanos, se producen ciertas tensiones que quizás no suceden cuando el presidente Xi se reúne con otros dirigentes", explicó.
La saga del incidente protocolar que marcó la llegada de Barack Obama a China, el sábado, se enriqueció con un tweet sarcástico de la agencia militar de inteligencia estadounidense. "La gran clase, China, como siempre", se podía leer en el corto mensaje de la Defense Intelligence Agency (DIA), rápidamente suprimido.