Río de Janeiro, Brasil. AFP.
En una exuberante fiesta policroma que trasladó el sambódromo al mítico estadio Maracaná, unas 70.000 personas dijeron adiós a los Juegos bajo la lluvia y vientos de más de 100 km por hora.
"Fueron unos Juegos maravillosos en la ciudad maravillosa", declaró el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, antes de que se apagara en forma definitiva la llama olímpica en el Maracaná.
La mayoría de los brasileños ha quedado orgulloso de la imagen que el país mostró al mundo, pero también creen que las Olimpíadas hicieron más daño que bien, señaló un sondeo del instituto Ibope difundido el domingo.
Un 62% de los encuestados dijo que los Juegos fueron más negativos que positivos, mientras 57% consideró que mejoraron la imagen de Brasil a nivel internacional, mostró la encuesta del diario O Estado de San Pablo.
Este país con inmensas desigualdades sociales padece desempleo récord, una inflación que duplica la meta oficial y la peor recesión en casi un siglo. Tras la fiesta, ha llegado la hora de pagar las cuentas.
LO QUE SE VIENE
Apenas caído el telón de los Juegos, los brasileños se preparan para enfrentar días dramáticos con el inicio este jueves del juicio de destitución de la suspendida presidenta Dilma Rousseff. Acusada de maquillar las cuentas públicas, Rousseff insiste en que es víctima de un golpe legislativo tramado por su ex vice y actual archirrival, el presidente interino Michel Temer.
Todo indica que será destituida por el Senado a fin de este mes. Abucheado el 5 de agosto en la ceremonia de apertura, y con muchos brasileños protestando en su contra en los estadios olímpicos, Temer prefirió no acudir al cierre de Río 2016 para evitar nuevas humillaciones.
Senado inicia etapa final del impeachment
El Senado iniciará este jueves la etapa final del impeachment de la presidenta Dilma Rousseff, delfina de Lula y acusada de contabilidad 'creativa' de las cuentas públicas. Suspendida desde mayo, todo indica que será destituida a fin de mes y que Temer, su ex vice, gobernará hasta el 1 de enero del 2019.
La semana pasada, Dilma Rousseff dijo que irá al Senado a pedir "justicia" en el alegato que dará ante el Senado por el juicio de destitución.
La primera mujer en llegar a la presidencia de Brasil está acusada de haber violado la Constitución al autorizar gastos sin la aprobación del Congreso y de manipular las cuentas públicas, lo que le valió la apertura del impeachment por un parlamento muy adverso a su gobierno.
La mandataria dispondrá de media hora -que podría ser extendida- para hacer su alegato el lunes 29 de agosto y se estima que la votación final del Senado sería en torno al 31 de agosto.