La Cámara de Senadores retoma el proceso de enjuiciar a los 3 ministros de la Corte Suprema de Justicia, a pedido de los legisladores del sector liberal y colorado, que abogan por dar un corte definitivo al proceso que inició hace dos años.
Integrantes de la mesa directiva del Senado, que se reúnen hoy, tienen un pedido de la bancada liberal de retomar el tema cuanto antes. El presidente del Senado, Robert Acevedo, al asumir el cargo, había señalado que una de sus prioridades iba a ser tratar el tema juicio, pero hasta ahora no fue convocada sesión alguna.
En una carta enviada a Acevedo, los liberales solicitaron convocar a sesiones extraordinarias para dar continuidad a las siguientes etapas del juicio político al ministro de la Corte Sindulfo Blanco, varado desde el pasado abril. Igualmente están pendientes el tratamiento el juicio político contra Óscar Bajac y César Garay Zuccolillo.
"Tenemos que dar un finiquito al juicio político, sea cual sea el resultado ya que es una tarea pendiente del Senado", habían argumentado los liberales.
Los once colorados oficialistas más los cinco de los ochos disidentes del Partido Colorado junto con dos del Partido
Union Nacional de Ciudadanos Éticos (Unace), y nueve de doce azules estarían en condiciones de respaldar el enjuiciamiento.
Los parlamentarios del sector opositor sostienen que solo se trata de un pacto Llano-Cartes, camuflado en el discurso de renovar el poder judicial con la finalidad de lograr cuoteo. Para proceder a destituir a los ministros de su cargo los senadores deberán contar con treinta votos como mínimo (mayoría absoluta), de un total de cuarenta y cinco legisladores.
El enjuiciamiento de los ministros pasó por dos etapas, pero está "cajoneado" desde hace casi dos años. Hubo intenciones durante la presidencia del disidente Mario Abdo Benítez, pero no fue posible. En abril, el Senado convocó a tres sesiones extra. La primera precisamente el 6 de dicho mes donde los diputados colorados Ramón Romero Roa y Miguel Ángel del Puerto, presentaron las acusaciones mientras que el 26 no se logró escuchar los alegatos de la defensa del primer enjuiciado (Blanco), por falta de quórum. Por último, el 17 de mayo se había fijado una nueva sesión extra, la cual tampoco tuvo éxito.