A dos semanas del trágico suceso que enlutó a la familia Zanotti Cavazzoni, el joven Alessandro Zanotti, de 30 años, fue dado de alta ayer, para continuar la recuperación en su domicilio. El hombre al igual que su sobrina de 3 años fueron víctimas de los proyectiles disparados por los agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) que habían realizado un allanamiento en la zona rural de Nueva Italia.

Luego del operativo, los uniformados siguieron la camioneta blanca del señor Ulrico Zanotti en la que también estaban su esposa, su hijo Alessandro y su nieta de 3 años, Viviana Paredes Zanotti, quien también fue alcanzada por las balas y días después falleció a causa de la gravedad de las heridas.

El operativo encabezado por el fiscal Carlos Alcaraz buscaba un depósito de marihuana en la zona y tras concluir con el primer allanamiento divisaron el vehículo de Zanotti, quien al ver la comitiva dio marcha atrás para regresar a su campo debido a que los móviles del operativo no tenían ningún distintivo ni chapas.

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El padre del joven baleado dijo que la recuperación de su hijo demorará unos tres meses, ya que recibió el impacto de tres proyectiles: uno de refilón en la cabeza, otro en la espalda y un tercero en el abdomen.

Tras el incidente sucedido el pasado 18 de junio, tanto Alessandro como la niña fueron derivados al Hospital del Trauma, donde la criatura falleció, mientras que su tío fue sometido a dos importantes cirugías.

"Tuvo un corte de 30 centímetros en el intestino grueso cuando le operaron la primera vez, en la segunda vez le volvieron a unir y le quitaron el apéndice, que no tiene mucha importancia", manifestó Ulrico al hablar de la evolución de su hijo. Agregó que Alessandro sigue shockeado, por lo que deberán solicitar la atención de un psicólogo, atendiendo la situación que les tocó vivir.

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