Recientemente la calificadora internacional de Riesgos Standard & Poors, en la última calificación realizada a nuestro país ha rebajado la tendencia de Positiva a Estable, pero manteniéndose en contrapartida nuestra calificación de solvencia en BB.
Bien sabemos que todo esto es eminentemente dinámico y para nada estático a través del tiempo, y creo que somos bastante conscientes de que Paraguay no es una isla, sino que independientemente al comportamiento de la macro y microeconomía (aspectos cuantitativos), además de todos los demás aspectos cualitativos que también se tienen muy en cuenta para la asignación de una calificación de riesgos, está sujeta a los cambios que se vienen dando a nivel regional y de extra-región.
Personalmente, me hubiera sentido inquieto si es que nuestra calificación de solvencia "BB" haya tenido un Down grade, pero hemos mantenido inalterable idéntica calificación, siendo sólo nuestra perspectiva la que ahora ha pasado a ESTABLE, pues es innegable que desde el punto de vista cualitativo principalmente aún nos quedan varios "deberes" por ir reforzándolos como desde luego estaba bien "clarito" entre las condiciones primarias a ser observadas por la calificadora, como para que podamos escalar el peldaño que nos está faltando para lograr el grado de inversión.
Bien sabemos que las obras de infraestructura a nivel país encaradas por el MOPC esperábamos que a esta altura ya observen un mayor dinamismo, pero lamentablemente por a o b motivos, o también por factores incontrolables que se presentaron por el camino no han sido posible.
La Ley de Responsabilidad Fiscal si bien hasta ahora sigue manteniéndose dentro de los márgenes no superiores a los niveles normales, es dable reconocer como muy bien lo había señalado el Dr. Felipe Larraín, ex ministro de Hacienda de Chile, que nuestra base tributaria debe ser ampliada, pues hoy día dependemos mucho del comportamiento que puedan tener los impuestos indirectos y que en un porcentaje importante van cada año a engrosar los Gastos Corrientes dentro del PGN.
El gran signo de interrogación que se abre ahora son los recientes cambios realizados en la mesa directiva del Senado, en donde los disidentes al gobierno no solo han logrado hacerse nuevamente de la Presidencia y Vice Presidencias, sino también "ganado" los cupos para ocupar las principales posiciones dentro de entes importantes como los son la CGR y el Consejo de la Magistratura por ejemplo, y también dentro de la Defensoría del Pueblo (aunque este último ente con una relevancia no equiparable a las anteriores).
Como se puede observar desde el punto de vista institucional es en donde radican nuestros principales "problemas" y mientras muchos políticos no pongan a los intereses comunes del país en primer lugar anteponiendo a sus intereses personales, siempre será "un palo en la rueda" que los vamos a seguir encontrando.