La consistencia en la estabilidad, el colchón del sector privado, la apuesta del sector agrícola en la tecnología, el enfoque para el desarrollo del capital social y la inclusión permitieron a Paraguay consolidarse en el bloque, incluso, superando a sus vecinos.
En el 5to piso de uno de los edificios corporativos ubicado a metros de las Avenidas España y Brasilia se encuentra la oficina del Banco Mundial. Allí aguarda Dante Mossi, representante residente, que desde hace dos años viene gestionando proyectos focalizados en áreas de desarrollo rural, educación, apoyo a las políticas públicas, entre otros.
Dante hizo un espacio en su agenda para recibir al equipo de Foco y resaltó, antes de adentrarse en un mano a mano, que Paraguay está ingresando a un mundo cada vez más globalizado, y, que esto, lo impulsará a salir del corazón de América, para alcanzar mayor notoriedad.
¿Cuál fue la estrategia monetaria que implementó el Banco Mundial para iniciar su plan de trabajo en Paraguay?
Vinimos con una estrategia de 1.000 millones de dólares para trabajar en Paraguay. El primer préstamo fue para invertir en agricultura, hace 60 años. Somos una institución para el desarrollo, y hemos notado que el país ha cambiado. En efecto, esta estrategia refleja la madurez que está teniendo el país. Por ello, trabajamos directamente con el Gobierno.
En particular, lo hago directamente con el Ministerio de Hacienda, pues tenemos agencias que trabajan con el sector privado y, en el caso de Paraguay, fue realmente un asunto extraordinario. Aquí es más bien el sector privado el que está llevando al país a un estado de desarrollo y es el sector público el que se está convirtiendo en el cuello de la botella para que el sector privado vaya ayudando al mercado.
En estos últimos diez años, ¿hubo avances o retrocesos en la economía nacional?
Paraguay tiene una economía que ha ido creciendo en un 5%, en los últimos 10 años; es el cuarto importador de soja más importante y el sexto importador de carne, tuvo un crecimiento económico del 4,9% anual entre el 2004 y el 2014, redujo la pobreza, de un 44% a un 23%, en una década.
Cuando llevamos nuestra propuesta al directorio muchos, cuestionaban que Paraguay es un país sin salida al mar y nosotros respondimos que quizá no tenga salida al mar, pero tiene ríos con salida al mar, hay abundancia de tierras agrícolas y tierras que están siendo explotadas.
Existen países más grandes que Paraguay, pero no tienen la calidad de tierra que tiene este país, es el primero en América Latina en producir energía eléctrica, es un país joven, tiene un modelo donde el desarrollo agrícola fomenta la disminución de la pobreza. Los cambios en Paraguay se están dando, lo queramos o no, y todos los sectores deben adaptarse para que el país siga creciendo. El motor de la economía es la agricultura y la ganadería.
¿Qué contribuciones realizó, hasta el momento, el Banco Mundial a Paraguay?
En estos 64 años, el Banco Mundial contribuyó al desarrollo del país, a través de la puesta en marcha de 67 proyectos, mayoritariamente, enfocados a la agricultura y ganadería, a préstamos al sector público, al transporte, la educación, al agua y el saneamiento.
En el área de agricultura y ganadería trabajó con 23 proyectos, otorgó créditos que permitieron el primer programa de microcrédito para 2.000 productores rurales, además de la titulación de 50 comunidades indígenas y el diseño de planes de desarrollo para la diversificación de producción de 9.200 familias campesinas e indígenas.
En el área de educación apoyó la creación de las primeras 8 escuelas técnicas, científicas y vocacionales del país en 1972, y, cuatro años después, promovió la ampliación de las mismas, llegando a 545 centros de aprendizaje que permitió el acceso a 18.000 nuevos estudiantes rurales. En 1.995 apuntaló la reforma de la educación haciendo énfasis en la educación secundaria, el fortalecimiento de docentes, la donación de libros y la construcción de varios centros educativos que hoy se convirtieron en escuelas técnicas de gran demanda.
El análisis del gasto público en educación indica que en Paraguay se dio una disminución del porcentaje del Producto Nacional Bruto (PNB) destinados al sector educativo, habiendo alcanzado el 5,1% en el año 1.999 y reduciendo a 4,1% en el año 2.010.
¿Qué factores permitieron a Paraguay construir una economía floreciente?
Paraguay crece seis veces más rápido que cualquier otro país de la región. Este es un logro muy positivo que vino acompañado de importantes movimientos de desembolsos, inversionistas interesados en conocer Paraguay, leyes que fueron aprobadas como la Ley de la Información que, si bien ya estaba vigente en América Latina, en nuestro país era una novedad.
Estamos ingresando a un mundo cada vez más globalizado. Paraguay apunta a salir del corazón de América y ser más visible. Se está trabajando en ello. Exponerse a estos sistemas de monitoreo es estar en el ojo de la tormenta, lo que implica responsabilidad y mayor transparencia.
Por otra parte, también es necesario destacar que hubo un diálogo constructivo entre los sectores público y privado. Esto es positivo, pues es allí donde salen a la luz los resultados finales que atañen al Banco Mundial en cuestión de pobreza y prosperidad compartida. Estamos seguros de que va a ir mejorando, si hay un trabajo en conjunto de ambos sectores, situación que ya existe, por lo que podemos afirmar que el 2015 fue un buen año.
¿Podría referir las proyecciones económicas del Banco Mundial para el 2016?
Como Banco Mundial analizamos la estructura productiva del país y descubrimos que su esencia está basada en la agricultura que, por cierto, va creciendo en áreas sembradas y en productividad. Sabemos que los precios de los commodities bajaron. El análisis interno que realizó el Banco indica que estos precios se mantendrán.
¿Cuáles serán los proyectos que apuntalarán el crecimiento de Paraguay en los próximos años?
El 18 de enero de este año, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones abrió la oferta del proceso de las APPS, de las rutas que unen Asunción con Ciudad del Este. Este es el primer gran proyecto de inversión público-privada, en el que el sector privado invierte en nombre del sector público.
Sin embargo la APP es un proceso que se está haciendo en estos momentos, una vez que la lista esté concluida, el Gobierno debe optar por la de mayor conveniencia, y, es el sector privado el que va a comenzar a construir. En dos años más, esa carretera va a estar organizada porque de algún modo, a la larga, también generará ingresos.
¿Qué tipo de ingresos generará esta carretera?
Impulsará favorablemente el transporte de viajes, de combustibles y de alimentos. Lo cual genera mucha actividad económica local, por lo que el costo es optimista. Estamos hablando de 400 millones de dólares para una carretera que una Asunción y Ciudad del Este, que evitará largas horas de viaje, factor número uno y el factor número dos es que estamos acerándonos, cada vez más, al año 2.023 en el que Paraguay y Brasil ya estarán terminando de pagar lo correspondiente a Itaipú, de modo que ese dinero quedará libre y de alguna u otra manera ingresará al tesoro público.
¿Considera que el cambio de Gobierno en Argentina será favorable para Paraguay?
Yo creo que hay una esperanza. Cuando asume una nueva autoridad siempre esperamos que las cosas cambien, la ventaja para Paraguay es usar el río Paraguay. Entonces al país le conviene que en Argentina estén bien. Cuando me refería a estrategias para el país, me refería a una estrategia que vamos a incorporar con el Gobierno hasta el 2018.
Cuando nosotros presentamos nuestra estrategia para Paraguay, el directorio africano se nos acercó y nos preguntó ¿por qué Paraguay es tan exitoso si no tiene salida al mar? Y nosotros le respondíamos que este es un país rico, con unos ríos preciosos, y entonces nos dicen: "Nosotros también. Y no somos potencias productoras de nada". Entonces ahí viene la pregunta, ¿Cuál es la diferencia? Y la respuesta es obviamente que Paraguay tiene la cuarta flota más grande del mundo y, por eso, es fácil para este país llevar y traer productos, pero con un socio. Hace unas semanas tuvimos un foro donde, casualmente, estábamos hablando de la importancia y de la eficacia de que dos países puedan manejar sus fronteras y, en este caso, concordamos que conviene que lo que sea bueno para Argentina, pueda ser bueno para Paraguay.
¿Sufrirá cambios la actividad macroeconómica para el presente año?
La actividad macroeconómica se va a mantener. Es decir, van a mantener la prudencia de las cuentas públicas, una baja inflación cambiaría acorde a la realidad nacional, uno de los aportes más importantes sin duda tiene que ver en cómo funciona la economía de Brasil, pero en general las reglas fiscales van a proseguir igual, entonces el activo más valioso del Paraguay sigue estando intocable y eso nos hace bien a nosotros porque el impuesto más caro que tiene la economía en los países pobres, es la inflación y al mantenerse esto estable, podemos decir que beneficia a este sector .
¿Cuál es el plan de trabajo que tienen contemplado al 2018?
El objetivo principal es contribuir a reducir la pobreza extrema al 9% para el 2.018, fomentar el crecimiento de los ingresos del 40% más pobre a un nivel que supere el promedio nacional. Queremos proteger a los menos favorecidos de la volatilidad, con una mejora de la gestión de riesgos agrícolas, mayor inclusión financiera y mejora de la gestión ambiental en un 18% de la superficie del Bosque Atlántico del Alto Paraná. Aspiramos también a que los pueblos indígenas tengan acceso al agua potable, del 2,5% al 6,5%.