El ministro de Relaciones Exteriores, Eladio Loizaga, dijo ayer que el Paraguay seguirá con su postura de no inmiscuirse en los problemas y procesos internos de otros gobiernos, al referirse a la suspensión de Dilma Rousseff en la presidencia de la República.
"La posición del Paraguay es no interferir en cuestiones internas de otros Estados, como no quisimos que se metieran en un momento dado acá", ratificó el canciller paraguayo.
Indicó que el tema sigue siendo algo sensible para el gobierno paraguayo, "incluso remontándonos desde la independencia de 1811", agregó. Señaló que como Estado se respeta la decisión institucional de la República Federativa del Brasil.
Rousseff está acusada de haber alterado cuentas públicas para maquillar el déficit presupuestario de su gobierno. La denuncia hace referencia en particular a "pedaladas fiscales", como se denomina en Brasil, que implica el uso de fondos de bancos públicos para cubrir programas de responsabilidad del gobierno.
Con la previa aprobación de la Cámara de Diputados, la Cámara de Senadores de Brasil aprobó con 55 votos el impeachment a Dilma, quien solo obtuvo 22 votos a favor. La suspensión de Rousseff en la titularidad del Poder Ejecutivo es por 180 días, mientras dure el proceso. Consecuentemente, asumió ayer como presidente interino el vicepresidente, Michel Temer.
REACCIONES
El analista político, Alfredo Boccia, sostuvo que por experiencia propia los paraguayos conocen el manejo de este tipo de procesos. "Los juicios políticos y destitución crean una crispación política y social muy fuerte, entre las distintas posturas ideológicas y políticas", manifestó.
Por su parte, el senador del Partido Unace, Jorge Oviedo Matto, señaló que Paraguay respeta en este caso la soberanía del Brasil y no se inmiscuye en el proceso, como así lo hicieron los parlamentarios del vecino país en el 2012, cuando se llevó a cabo el juicio político al ex presidente y ahora senador Fernando Lugo.
Mientras que el diputado José María Ibáñez, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, dijo que "nosotros respetamos los procesos que tiene Brasil, en su momento cuando en el Paraguay se tomaron decisiones similares hemos reclamado el respeto a la comunidad internacional. No vamos a caer en ese mismo error y aceptamos los resultados que provengan de esas decisiones políticas".