Los hinchas del club Boca Juniors se presentaron para declarar ayer ante el fiscal Aldo Cantero, tras los incidentes registrados en Asunción, pero se abstuvieron. No obstante, fueron imputados 6 de ellos por perturbación de la paz pública y el resto fue expulsado.

En total eran 237 aficionados los que quedaron detenidos una vez culminado el encuentro futbolístico contra Cerro Porteño. La justicia paraguaya finalmente resolvió la expulsión de los 231 hinchas del club argentino, que el jueves realizaron disturbios en Asunción. Sin embargo, 6 de los barrabravas, entre ellos Rafael Di Zeo, quedarán en el país para afrontar proceso penal.

El fiscal Aldo Cantero informó que los demás serán sacados del país por vía de la expulsión, tras ser detenidos por los disturbios ocasionados en el barrio San Felipe, parte de la Chacarita, antes del partido entre Boca y Cerro Porteño.

La jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, Elisa Ledesma, informó que los hinchas argentinos debieron declarar ante el fiscal de la Unidad de Convivencia Ciudadana, Aldo Cantero.

En principio, el informe de la Policía refería que eran más de 250 los detenidos, pero luego confirmó que la cifra era de 237, que quedó en la Fuerza de Operaciones Especiales (FOPE) una vez culminado el partido por los octavos de final de la Copa Libertadores de América, en el estadio Defensores del Chaco.

Horas antes del evento deportivo, los hinchas protagonizaron hechos de vandalismo, destrozaron varios vehículos, sobre la avenida Artigas, y hasta se enfrentaron con hinchas de Cerro y también hirieron a agentes policiales. Son cuatro los colectivos que quedaron demorados. De su interior se incautaron varias cajas de bebidas alcohólicas, marihuana y armas blancas.