Cuando se daba como un hecho que Pablo Caballero sería el técnico de River Plate, incluso fue presentado a los jugadores, ayer cambió por completo la película. El adiestrador finalmente decidió no tomar el cargo, porque encontró el club en malas condiciones, con muchos jugadores (46 en total) y sin posibilidades de hacer mucho para salir del pozo.

La dirigencia del Kelito, con Carlos Ortega a la cabeza, se moviliza para encontrar a un nuevo profesional, teniendo en cuenta que mañana deberá enfrentar a Cerro Porteño. Se mencionó a Óscar Paulín y Gabriel Amaya, como dupla, pero nada definido. También se habló de Alicio Solalinde, pero todo está en veremos.