Tras la reunión entre las autoridades municipales y el gobierno nacional, Mario Ferreiro destacó que mediante el diálogo buscarán destrabar el caos que generó en el tránsito el inicio de las obras en el superviaducto. "Tenemos una semana para que seamos más eficientes y que sea la gente la favorecida", indicó.

Seguidamente admitió que faltó coordinación entre todas las partes por lo que de ahora en más será prioritario proveer de la cantidad necesaria de oficiales de tránsito además de exigir la misma voluntad a las autoridades nacionales.

Por su parte el ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez se ratificó en que las obras continuarán destacando la apertura de los intendentes para solucionar el conflicto. Dijo que las calles alternativas están terminadas, por lo cual Ferreiro adelantó que irá con sus técnicos a verificar tal afirmación.